Artículo escrito por Guillermo Fernández:
El sueño se acaba. Aquel ilusionante proyecto que comenzó hace poco más de un año con fichajes prometedores y presentaciones de película se viene abajo tras la negativa del Al Thani a seguir poniendo dinero.
Mucho se está especulando con los motivos de esta repentina vuelta de tuerca que está sufriendo el asunto pero lo que es evidente es que lo que nos atañe, el plano deportivo, se está derrumbando a medida que pasan los días.
Las mejores apuestas del equipo están comenzando a salir y consecuentemente la ilusión por dicho conjunto se está desvaneciendo. El primero y más importante ha sido Santi Cazorla. El asturiano jugará la próxima temporada en el Arsenal tras comprobar la poca solidez del proyecto malacitano. Esta salida, que no será la primera, es, sin lugar a dudas, la más dura. Cazorla era el faro, la calidad y uno de los líderes de un equipo que ahora se queda sin ese guía dentro del terreno de juego que tantas tardes de gloria dio a los aficionados la pasada temporada.
Tras la salida de Cazorla, las noticias de fútbol apuntan en dirección a Rondón, Toulalan o Pellegrini, tres de los activos más importantes del equipo andaluz. En caso de que esto se llegue a producir como parece que así será, el Málaga perdería a su máximo goleador, a la cabeza visible y a su eje en el centro del campo. Casi nada. La crisis institucional que está sufriendo el club provocará un desmantelamiento de la plantilla y veremos si la pérdida de la plaza de Champions ganada en el terreno de juego con esos jugadores que no van a seguir.