Muchísimas veces encontramos papeles en nuestros buzones y casi las mismas veces que me encuentro folletos publicitarios de retailers o tiendas más pequeñas a pie de calle, me hago la misma pregunta. ¿Realmente es efectiva esta forma de publicitar tus productos (principalmente) o tus servicios?
Si lo vemos desde la óptima de una multinacional podemos pensar que el buzoneo quizás no sea la forma más glamourosa de relacionarse con sus clientes para expandir sus catálogos, como por ejemplo sucede con ese típico retailer sueco cuyo folleto es esperado cada cambio de temporada por millones de hogares.
Pero salvando alguna excepción, en mi opinión, ocurren dos cosas relevantes.
1.- Para empresas pequeñas (de barrio) es prácticamente la única forma que tienen de llegar a más gente de aquellas que frecuentan su punto de venta. Los recursos limitados les hacen prácticamente inaccesible recurrir a medios masivos como pueden ser la TV, Radio o Prensa. Seguramente tampoco están preparados para dar el salto a Internet (si bien en mi opinión deberían hacerlo)
2.- El coste de contratar una empresa de buzoneo como puede ser Geobuzón es muy bajo, y por tanto el retorno de dicha inversión puede ser realmente rentable si el hecho de dejar publicidad en los buzones de la zona acaba resultando efectivo.
Finalmente todo se trata de relacionar inversión, objetivo de ventas y canales de venta disponibles. Y resulta evidente que no es igual la capacidad de disparo que puede tener un gran retailer que una tienda pequeña de barrio, o un proveedor de servicios como puede ser un fontanero y cuyos ingresos mensuales dependen del éxito de estas pequeñas acciones de publicidad geolocalizada.