Considerado como el <=w"><=w"><=w" target="_blank">cuarto ciclón más intenso de la historia moderna, se formó el 2 de noviembre en un área de bajas presiones al sureste de Micronesia. Durante los siguientes días, alimentado por las cálidas temperaturas de las aguas de la región y por una cizalladura vertical de viento, continuó creciendo hasta convertirse en tifón el 5 de noviembre.
Sólo una jornada más tarde, el Centro Conjunto de Advertencia de Tifones lo catalogó como un súper tifón de categoría 5. En las siguientes horas, sus vientos continuaron intensificándose hasta que el 7 de noviembre cruzó las Filipinas y sembró el terror entre sus habitantes.
La espectacular imagen compuesta que encabeza este artículo, creada a partir de las instantáneas tomadas desde el espacio por la red de satélites geoestacionarios de la Organización Europea para la Explotación de Satélites Meteorológicos (EUMETSAT) y la Agencia Meteorológica de Japón (JMA), nos da una idea de la magnitud que alcanzó este gigantesco sistema de tormentas que, afortunadamente, se dio por disipado durante el dia de ayer.
Fuente: Abadía Digital