“Cuba es el país de la siguaraya”, reza una frase popular cubana. Esta resume lo que muchos sabemos que es Cuba, un país donde lo bueno y lo malo, donde lo atractivo y lo absurdo, se dan cita y configuran un país donde todo es posible. Es por ello que una vez leí lo que ocurre con los condones en Santiago de Cuba no pude dejar de recordar esa frase.
Es normal escuchar que en Cuba hay déficit de alimentos (hace días hablaba de la falta de papas), de desodorante o de frazadas para limpiar el piso, pero jamás había imaginado que la cosa llegara hasta tener déficit de condones. Y como el cubano siempre encuentra solución para todos estos problemas, las autoridades sanitarias en Santiago han encontrado una fórmula bien interesante para darle solución a dicho problema: remarcar la fecha de vencimiento de los que están almacenados.
Ignoro -a pesar de que según el director del establecimiento provincial de suministros médicos confirmó que dicha “medida” se encuentra avalada por la entidad nacional de control de calidad de los servicios médicos- si dicha decisión es la más correcta sanitariamente. No obstante, creo que es sano preguntarles a las autoridades que regulan la distribución de dicho producto en Santiago las causas de la mala planificación y control en la distribución lo que trajo consigo que todas esas cantidades de condones durmieran el sueño de los almacenes.
Me permito dejar acá, para juicio de los lectores de este blog, el reportaje que el periódico Trabajadores publicó este lunes y que da cuenta del caso que ocurre en Santiago:
Desabastecimiento de condones
Por: Betty Beatón Ruiz
Desde hace casi tres meses Yasmani va de una a otra farmacia, y visita los sitios gastronómicos donde siempre accedió a la compra de preservativos, pero no los encuentra. Como él tantísimas personas ven insatisfechas sus necesidades ante el desabastecimiento de condones que sufre la provincia de Santiago de Cuba.
El asunto preocupa a muchos, entre otras cuestiones, por la notable incidencia que tienen en el territorio las infecciones de transmisión sexual (ITS), y el VIH/sida en particular, una epidemia que afecta a más de mil santiagueros, y cada año muestra tendencia al incremento.
Según precisiones del doctor Ramón Suárez Ramírez, director del establecimiento provincial de suministros médicos, la distribución y comercialización de condones debe estabilizarse a partir del segundo trimestre de este año, beneficiadas por la llegada de envíos contratados en el exterior, así como por el proceso que actualmente se desarrolla de remarcar la fecha de vencimiento de los que están almacenados en la provincia.
Momento en que los condones son remarcados. Foto tomada de Trabajadores
Suárez Ramírez dijo que, para la labor de borrar la fecha incorrecta de vencimiento estampada en la envoltura de estos elementos protectores (noviembre del 2012) y poner una nueva (diciembre del 2014) “se cuenta con la autorización del fabricante, y con la certificación que avala su calidad, emitida por el Centro para el control estatal de medicamentos, equipos y dispositivos médicos de Cuba (Cecmed)”.
Tal y como reconoció el funcionario, la rotulación debió culminarse en el primer trimestre de este 2014, pero el proceso no tuvo la agilidad requerida y la demanda de la población quedó insatisfecha. Acotó que en Santiago de Cuba se consumen mensualmente unas mil 440 tirillas de tres preservativos cada una.
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