El invento tecnológico más importante de la historia

Publicado el 03 julio 2020 por Pedromolleda @masmarketing

Cuarta y última semana de esta patética edición de El retro blogger en la que los participantes han demostrado una más que evidente falta de compromiso y no habérselo tomado en serio (salvo Wilson, Morito y un servidor).

En esta edición express ha quedado claro que segundas partes, nunca fueron buenas (aunque en nuestro caso más bien serían quintas o sextas partes), pero a veces las cosas terminan porque tienen que terminar, y el deseo de algunos no siempre es capaz de mover la voluntad o motivación del resto. Por lo que a mi respecta, lecciones aprendidas.

En este cuarto post de El retro blogger, os hablaré del que en mi opinión es el invento tecnológico más importante de la historia.

A sabiendas de que mis compañeros-rivales serán más ingeniosos que yo, yéndose al momento en el que se inventó la rueda, el automóvil, el alcantarillado, la imprenta, el avión o los coches autónomos, o incluso Internet, de verdad pienso que el invento tecnológico que lo cambió todo fue el teléfono móvil (y su posterior evolución al smartphone).

El teléfono nos permitía comunicarnos en cualquier momento del día, con una inmediatez que hasta ese momento no existía siquiera en nuestras mentes. Primero con aquellos maletines y zapatófonos de los pocos privilegiados que podían permitirse lo que era -claramente- considerado un lujo al alcance de unos pocos, y con el tiempo fue reduciendo su tamaño a la vez que incrementando el número de funcionalidades.

Y es que el smartphone es el "all-in-one" perfecto para gestionar tu vida personal y profesional de forma rápida y eficiente. Con aplicaciones para el trabajo como el correo electrónico, la agenda, herramientas corporativas como Sharepoint, Teams, Skype y muchas otras.


Me llama mucho la atención cómo tiene la gente organizada su pantalla de inicio. Yo lo divido como véis en la imagen y me resulta mucho más útil que tener una colección de iconos sin ningún tipo de orden.

Es cierto que no están todas las apps en carpetas, y que aquellas que uso menos se quedan en el menú de aplicaciones, pero teniéndolo organizado de esta forma me resulta mucho más útil en el día a día.

Lo único que tendrían que mejorar los smartphones actuales es la capacidad de la batería, y es que en cierto modos vamos todos un poco acojonados (o con el cable en el bolsillo) dependiendo del tipo de día que tengamos, y por tanto del uso que le vayamos a dar al teléfono.

Hace años que se dice que el fabricante que consiga desarrollar y patentar una batería basada en otra cosa que no sea litio y que consiga que la batería de un smartphone dure al menos 2 o 3 días, se va a llevar el gato al agua, pero todos tienen claro que el gran caballo de batalla es la batería y siguen sin resolver el problema, porque a la vez que mejoran poco a poco las capacidades de éstas, le meten más y más potencia a los teléfonos, con lo que volvemos al punto de partida.

Por lo demás, el móvil se ha convertido en la cámara de fotos de cada uno de nosotros, en nuestro reproductor de música, con aplicaciones como Spotify, o en nuestro gestor de entretenimiento si eres un adicto a las series y no te importa verlo un poco más pequeño con Netflix, HBO o Amazon Prime.

En los viajes de trabajo (o de ocio), es genial poder tener tu gestión de tarjetas de embarque, las aplicaciones de tus aerolíneas más utilizadas, o un gestor como Tripit que realmente me encanta por lo que facilita de un vistazo los datos más importantes de tus vuelos, estancias de hotel, etc. Además, para el día a día, tener en el mismo sitio Cabify, Uber, o las aplicaciones de aparcamiento regulado en Madrid, está genial.

Incluso tengo una carpeta con cosas del colegio de los niños, que la verdad es que en este tiempo de coronavirus he usado mucho más de lo normal y ha terminado ganándose su propio espacio, al igual que las aplicaciones de deporte, como Garmin Connect, Wikiloc para mis rutas de montaña, o ahora que estoy dejando de correr, la web de la federación de golf para llevar una tarjeta virtual de todas mis salidas al campo.

En fin, que para mi el teléfono es el invento de la historia, y la prueba es que ha tenido un impacto en la población superior al 70%, y ya hay más gente con teléfono móvil en el mundo, que gente con agua corriente. Quizás deberíamos mirárnoslo un poco.