Título: El invierno más largoAutora: Cecilia EkbäckEditorial: Roca Bolsillo, 2017Páginas: 400.
SINOPSIS.
Laponia, 1717. Maija, su marido Paavo y sus dos hijas, Frederika y Dorotea, han emigrado desde Finlandia a la Laponia sueca, en la zona del monte Blackåsen. Paavo sufre de angustias y miedos incontrolables, y tuvo que abandonar su trabajo como pescador. Ahora la familia vive en una granja.
Una mañana, Frederika y Dorotea llevan a pastar a las cabras a la parte superior del bosque. Allí encuentran el cadáver de un hombre. Maija decidirá avisar de este suceso a los escasos y lejanos vecinos del pueblo que se encuentra a un día de distancia a pie, un lugar tenebroso y solitario que solo parece volver a la vida cuando las campanas de la iglesia convocan a la gente a través de la nieve. Es allí donde incluso los enemigos más antiguos de esa comunidad se reúnen y abandonan su aislamiento para verse de nuevo.
Maija irá conociendo a cada uno de los lugareños en su discreta investigación y se dará cuenta de que, así como la nieve oculta la tierra, sus habitantes esconden los más temibles secretos. Todos dicen que la muerte de ese hombre, quien resulta ser un miembro de la comunidad llamado Eriksson, solo puede deberse al ataque de un lobo. Pero ¿qué animal salvaje corta un cuerpo de esa manera, contan limpias y estudiadas heridas?
IMPRESIÓN PERSONAL.
Tengo que reconocer que me acerqué a este libro por su preciosa y misteriosa portada. Esos tonos de negro y gris junto a la sombra de una mujer y de esa especie de cuervo, ya de entrada, producen inquietud y te intrigan sin haber abierto aún el libro. Por suerte no me he equivocado con la elección porque es una novela que me ha sorprendido gratamente a medida que iba avanzando en su lectura y que me ha absorbido durante los días que me ha durado en las manos.
La historia nos va presentando paulatinamente a los distintos personajes que habitan la falda del Monte, un monte que todos apuntan a que está maldito y que muchas de las cosas que acontecen son porque el mismo monte y la propia naturaleza que lo rodea, provocan todo lo inexplicable. Comenzamos conociendo a la familia de Maija y Paavo con sus dos hijas Frederika y Dorotea. Todos son finlandeses y emigrantes desde la costa de ese país a esta parte de Suecia donde un familiar les ha cedido su cabaña para que puedan recomenzar su vida lejos de su lugar de origen. Cuando las dos niñas encuentran un cadáver en un claro del bosque, abierto de arriba abajo, su madre, Maija, comenzará a indagar entre colonos y nativos quien ha podido ser el asesino de Eriksson. Durante la investigación iremos conociendo a todos los habitantes del lugar, habitantes que no viven en un pueblo sino en casas aisladas. Durante la investigación empezarán a aparecer otros sucesos que han venido ocurriendo en el lugar y que ha afectado directamente a los niños y niñas del lugar.
No dudo en recomendaros esta novela. No es una novela negra al uso, no son unos personajes al uso ni una investigación que siga unos patrones conocidos. Es una novela que se mueve al ritmo del clima y de lo que la naturaleza te deja o los deja hacer, una investigación llena de misterios ancestrales y la magia de antiguos chamanes que todavía se hallan en estos parajes tan al norte de todo.