El juego de Ripper, de Isabel Allende

Publicado el 11 febrero 2014 por Xula


El juego de RipperIsabelAllende ISBN: 9788401342158Formato: Tapa dura– 480 Pág. Editorial: Plaza & Janés

Tal como predijo la astróloga más reputada de San Francisco, una oleada de crímenes comienza a sacudir la ciudad. En la investigación sobre los asesinatos, el inspector Bob Martín recibirá la ayuda inesperada de un grupo de internautas especializados en juegos de rol, Ripper.
«"Mi madre todavía está viva, pero la matará el Viernes Santo a medianoche", le advirtió Amanda Martín al inspector jefe y éste no lo puso en duda, porque la chica había dado pruebas de saber más que él y todos sus colegas del Departamento de Homicidios. La mujer estaba cautiva en algún punto de los dieciocho mil kilómetros cuadrados de la bahía de San Francisco, tenían pocas horas para encontrarla con vida y él no sabía por dónde empezar a buscarla.»
Hacía muchos años que no leía a Isabel Allende. A mi madre es una autora que le gustaba mucho y siempre tuvo bastantes novelas por casa, así que cuando yo tenía 15 años debí leerme casi todas las que encontré en el salón. Una detrás de otra, sin descanso. Así que pasó lo inevitable cuando leemos mucho de un autor y todo seguido: al final todo te parece casi igual, y te saturas.
De esta manera han pasado los años y no he vuelto a leer nada suyo. No por ningún motivo concreto, simplemente por el recuerdo de lo saciada que quedé de una narrativa muy característica. Claro que puedo lo mío pasó a ser otro tipo de géneros: terror, suspense, negra… Por eso cuando me enteré de que su nueva novela era precisamente novela negra, no pude resistirme a leerlo. No solamente porque el argumento es llamativo (no me lo podéis negar) sino porque en el fondo quería ver como se desenvuelve en un género que en mi opinión queda muy lejos de en el que generalmente se mueve.
Pero antes de nada tengo que reconocer una cosa: esta novela lo tenía muy difícil conmigo. Primero porque acababa de salir de otra lectura absolutamente envolvente que estaba compitiendo con ella. También me cogió en una semana muy complicada en la que me resultaba muy difícil ponerme a leer.Aun así, al menos debía hacer un esfuerzo para sintonizar con la lectura en general, porque como os digo, era una situación general no por la novela en particular.
Si al principio me costó comenzar a leerlo fue principalmente por dos motivos. El segundo párrafo de la sinopsis se corresponde con el primero de la novela, y pasada esa introducción, nos lleva en un flashback hasta los inicios de esa ola de crímenes. Así que los motivos son: 1. Ese momento inicial (en el que secuestran a la madre) tarda un tiempo en llegar 2. Es una novela coral, con muchísimo personajes de lo más peculiar.
Si tuviera que definirla, la llamaría “novela de personajes” porque son ellos los que le aportan todo a la trama. De esta manera, si lo que estabas buscando es una novela negra que te atrape por su investigación, esta queda un poco de lado y quizá te resulte aburrido. Sin embargo, mi visión de la lectura cambió en el momento que me di cuenta que en realidad no estaba leyendo una novela policiaca, sino una novela de Isabel Allende. Cosa que era obvia, pero que en el fondo había olvidado…
Volviendo a los personajes, los vamos conociendo gracias a retazos de sus historias dentro de las mismas escenas. Es decir: están charlando en una cafetería y entonces te cuenta alguna anécdota con el narrador. Hay partes donde llega a hacerlo dentro del dialogo. A veces eso te saca de la línea principal, aunque consigue que te enganches a los protagonistas. Como comentaba, todos muy particulares y muy de su estilo. Por ejemplo Indiana, tan mística, o Amanda, tan madura e infantil al mismo tiempo).
¿Por qué son ellas ejemplos? Porque en realidad Isabel Allende escribe en la mayoría de las ocasiones historias de mujeres: peculiares, fuertes e independientes que luchan contra el entorno y las circunstancias. Por ello Amanda es el máster de esa extraña partida de rol que se vuelve una realidad aplastante. Por eso Indiana es una mujer que vive rodeada de tres hombres pero libre de ellos (Allan, Ryan, Bob e incluso su propio padre)
La historia la sitúa en San Francisco, una ciudad especial dentro de EEUU y llena de contrastes culturales. De esta manera, además de introducir sus peculiares personajes sin que llamen la atención, también consigue que la investigación policial siga más los cauces de lo “conocido” porque todos sabemos (porque hemos leído o vemos películas) como se resuelve un crimen con la policía, el CSI y demás.
Ahora bien, una vez terminada la novela me planteo un par de reflexiones sobre el tema del juego de rol: yo he jugado y las escenas realmente no me parecen una partida. Seguramente Ripper lo fue en su momento, pero más que nada ahora son conversaciones de diversión entre un grupo de amigos que se asemejan más a un brainstorming que a un juego. De hecho, no se asemejan en nada. Me hubiera gustado que incidiera más en ese punto porque le hace quedar un poco flojo. Además, creo que a los personajes que conforman el grupo de Ripper se les puede sacar mucho mas partido porque al final resultan casi meros figurantes: todo lo mucho que sabemos de ciertos personajes, lo desconocemos de estos otros.
Una cosa que me ha resultado chocante es que haya estructurado la novela en meses y cada día se mencione por separado, cuando en realidad poco cuenta de ese día al irse con anécdotas de años pasados. Eso sucede mucho sobre todo al principio, cuando estamos más pendientes de querer saber sobre los asesinatos y que pasen los días. Pero en el tramo final ya se ajusta mas a lo que sucede estrictamente en ese día.
Aprovecha a tratar de paso muchos puntos de interés, algunos de ellos de reivindicación: la marginación de algunas personas que creemos diferentes, la mutilación genital femenina, la ecología, el sexo,… Un poco al estilo al que nos tiene acostumbrados y que según sus seguidores más fieles es uno de sus puntos fuertes junto a sus personajes y su realismo mágico.
Un aspecto sobre el que había leído en algunas reseñas es la forma de reaccionar de la policía cuando Amanda les presenta su material. Hay quien dice que no es realista, teniendo en cuenta que en el fondo es una cría. Ahí yo debo discrepar: si no fuera que su padre es el inspector que lleva la investigación y que está al tanto de casi todo, podría resultar raro. Pero tal como ha planteado la evolución de la trama, me parece bastante creíble. Quizá no tanto que un padre le proporcione informes de autopsia a su hija de 16 años, pero creíble dentro de unos límites.
En cuanto al final, para mi comienza en el último tercio del libro, que es cuando realmente llegamos al momento que nos adelantaba al principio. Ahí el ritmo ya aumenta muchísimo más, hasta que descubrimos todo y cierra la historia. Por supuesto, hay tantos personajes (y muchos de ellos aparecen un poco de refilón) que podría ser cualquiera de ellas. De hecho, acerté a medias, aunque hubo muchas implicaciones que yo no había tenido en cuenta… sobre todo porque si eso es así, Indiana debía estar ciega para no darse cuenta. Los que lo hayáis leído, me entenderéis. Los que no, deberéis leerlo para saber a qué me refiero.
La prosa muy de sus estilo, limpia y muy lirica, con muchos detalles y muy intimista. Parece que desentona un poco con el género negro aunque bien mirado parece más un malentendido en la campaña más que un error de la propia novela. Si os dais cuenta son precisamente los puntos potenciados los que más chirrían de la novela (la investigación y los juegos de rol) por lo que quizás debería haber ido encaminado por otro lado.
En resumen, una novela negra que en realidad no es tal, pero que puede llamar la atención tanto de los amantes del género como los fans de la autora. Quizá la mejor descripción sea mediante algo que ella dijo en una presentación: que pretendía un poco burlarse del género, de la explosión de autores nórdicos. Si lo que tenéis claro es que es una novela que tiene como fondo una trama de asesinatos, pero que realidad es de personajes con un toque de Isabel Allende, seguro que la disfrutareis.