SEVILLA, 4 May. (EUROPA PRESS) -
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Dos Hermanas (Sevilla) ha abierto juicio oral contra Luis Miguel Briz Torrico, el joven que asesinó a sus padres y a su hermana en una vivienda unifamiliar de la localidad sevillana de esta localidad sevillana el día 28 de febrero de 2013.
Fuentes del caso han informado a Europa Press de que el Juzgado ha dictado auto de apertura de juicio oral contra el acusado, para quien la Fiscalía pide 57 años de cárcel, y ha emplazado a las partes a personarse en la Audiencia Provincial de Sevilla, donde un jurado enjuiciará al imputado en los próximos meses.
El Juzgado ha abierto juicio oral contra el imputado después de que la Audiencia Provincial de Sevilla haya rechazado la petición de su defensa para que fueran citados a declarar en fase de instrucción los psiquiatras que atendieron tanto a su madre como a su hermana y que les diagnosticaron distintas enfermedades mentales.
La Audiencia, en un auto, ha denegado dicha petición y ha emplazado a llevar a cabo en el juicio las declaraciones de los psiquiatras, que emitieron sendos informes según los cuales la madre del imputado sufría trastornos delirantes y la hermana una esquizofrenia delirante.
Tanto la abogada de la acusación particular, que pide 60 años de prisión, como la Fiscalía, que solicita una pena de 57 años, se habían a dicha solicitud.
En sendos escritos elevados al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Dos Hermanas, la acusación particular y la Fiscalía piden para el acusado dichas penas al considerar probado que cometió tres delitos de asesinato.
No obstante, el Ministerio Público considera que en este caso concurre la eximente completa de enajenación mental, por lo que solicita para Luis Miguel Briz 57 años de cárcel por los tres delitos de asesinato que “serán sustituidos por el internamiento para tratamiento médico en establecimiento” por el tiempo de la condena, mientras que en concepto de responsabilidad civil pide que indemnice con 172.036,68 euros a los familiares de las víctimas.
LOS HECHOS
En su escrito de acusación, al que ha tenido acceso Europa Press, el Ministerio Público relata que los hechos tuvieron lugar “en hora indeterminada” del 28 de febrero, cuando el acusado llegó a su domicilio y se hizo con un cuchillo de cocina de 19,5 centímetros de longitud con el que, acto seguido, “acometió por detrás, sin que lo esperara y con ánimo de darle muerte”, a su hermana.
De este modo, y “sin darle tiempo a reaccionar”, degolló a su hermana, que falleció “a consecuencia directa” de las heridas sufridas, pone de manifiesto el fiscal.
En ese instante, los padres del acusado “pretendieron dirigirse” desde el dormitorio en el que se encontraban “en auxilio” de su hija, “si bien al salir de la habitación se encontraron de frente y de forma inesperada” con el acusado, quien “en la ira del ataque” les abordó “con cuchillo en mano e impidiéndoles la salida” del cuarto.
Así, “con ánimo de darle muerte”, el imputado acometió en primer lugar a su madre, a la que asestó distintas puñaladas que le causaron un total de 28 heridas, de entre las que se pueden diferenciar algunas “de carácter superficial” que afectaron a manos y antebrazos, “propias de actos de defensa frente a los ataques de su agresor, al producirse las acometidas frente a frente”.
HERIDAS DE DEGÜELLO
El fiscal cita a continuación las heridas incidas, causadas en la zona del mentón, clavícula y barbilla, “heridas fallidas cuyo destino último era alcanzar la zona del cuello”, y la herida “causante de la muerte” y que consiste en el “degüello”, lo que le provocó la sección de la vena yugular externa, la sección parcial de la tráquea y el desgarro del esófago. Todo ello provocó una hemorragia externa masiva que le causó la muerte “en ese mismo momento”.
Acto seguido, “y sin solución de continuidad”, el acusado atacó a su padre “con idéntico ánimo de acabar con su vida” y le asestó diversas puñaladas que le causaron un total de 14 heridas, de entre las que se pueden distinguir las causadas en miembros superiores, que son de “carácter superficial, propias de la defensa que sostuvo con su agresor en un intento de parar acometidas y de sujetar el arma”; las heridas incisas en mentón y clavícula, “heridas fallidas cuyo destino último era alcanzar la zona del cuello”, y las heridas de degüello, que le provocaron finalmente la muerte.
Según añade el fiscal, el acusado, después de acabar con la vida de su hermana y sus padres, “arrastró los cuerpos hasta el distribuidor de la vivienda, colocándolos sobre una manta y cubriéndolos con una sábana”, tras lo que, al día siguiente, se personó en los juzgados de Dos Hermanas manifestando al funcionario que se encontraba de guardia “que en su casa había tres personas cadáver y que tendrían que hacer algo con ellos”.
El fiscal agrega que, en el momento de los hechos, el imputado presentaba una patología psíquica de carácter irreversible y por brotes, consistente en esquizofrenia paranoide, no presentando conciencia de su enfermedad, a lo que se suma una “escasa” adherencia terapéutica, “lo que ha contribuido a que presente descompensaciones psicopatológicas”.
De su lado, el abogado defensor considera que su cliente cometió tres delitos de homicidio, aunque defiende la existencia de las eximentes completas de trastorno mental y defensa propia, pidiendo por ello que sea internado en una clínica particular a fin de que sea tratado de dicho trastorno.