El lado bueno de las cosas es una comedia romántica, digan lo que digan, lo que pasa es que además tiene una base excelente, unas interpretaciones grandiosas y eso la convierte además en una buena película.
Para empezar tiene una buena historia, un guion magnifico que te lleva siempre adelante sin perder nunca el interés, sobretodo gracias a unos personajes tan bien interpretados como incómodos para el espectador en un principio. Y es que es verdad, pocos personajes me han resultado tan incómodos como los de Bradley Cooper, Jennifer Lawrence o Robert De Niro , pero también pocos han conseguido ganarme totalmente sin que me de cuenta antes de acabar la película.
Mucha culpa de todo esto también la tiene su director, David O.Russell, que hace un trabajo excelente, algo que no debería sorprendernos si hemos visto algo de su filmografía anterior como Flirteando con el desastre o la genial Tres Reyes.
El lado bueno de las cosas es una película dura que te va ganando poco a poco, profunda a muchos niveles, y decididamente romántica que te golpea hasta dejarte K.O para luego ayudarte a levantarte con toda la esperanza del mundo.