Título original: The Jungle Book
Páginas: 240
Editorial: Editorial Sexto Piso
El libro de la Selva de Rudyard Kipling es una de esas obras que, lejos de perder vigencia, sigue encontrando a miles de lectores generación tras generación. La fábula del niño Mowgli criado por los lobos, el oso Baloo, la pantera Bagheera y el malvado tigre Shere Khan se ha convertido en un arquetipo universal que reúne, como los grandes mitos, lo mejor y lo peor de las andanzas del ser humano en esa jungla inmensa que es el planeta Tierra.
Además de su indiscutible valor literario, El libro de la Selva es una obra sumamente visual, que se presta como pocas para ser acompañada por la interpretación gráfica de artistas que actualizan la visión original de Rudyard Kipling. Esta edición contiene las ilustraciones de Gabriel Pacheco, que con un estilo que oscila entre lo real y lo místico añade al texto una dimensión extra, para acompañar a los lectores en ese viaje a través de la jungla de Kipling y sus animales inmortales, que escenifican una y otra vez sus historias para nuevos lectores interesados en acercarse a ellas.
Pero no todo es miel sobre hojuelas, ya que el temible tigre Shere Kan que detesta a los humanos, quiere deshacerse del cachorro, y así logra poner a muchos animales en la selva en contra del pequeño. Pero en fin, no les contaré todo lo que sucede porque entonces no tendría ningún caso que lo lean. Pero Mowgli pasa por muchas peripecias tanto en el reino de los animales como en el hogar de los humanos.
Y algo que desconocía completamente, es que El libro de la selva es una recopilación de historias cortas, la de Mowgli es la más extensa, pero también hay otras tantas sobre otros animales donde Mowgli no aparece. Como es la historia de Rikki Tikki Tavi (la que más me gustó después de la historia de Mowgli), y sobre otros animales como son focas, elefantes y hasta caballos.
No esperaba que el libro se pareciera mucho a las adaptaciones que conocía (La caricatura de Disney y la nueva película) pero tampoco esperaba que fueran total y completamente diferentes. En definitiva, lo único que Disney tomó del libro de la selva fue el ambiente y el nombre de los personajes, porque de resto la historia es casi en su totalidad, diferente. Pero eso me gustó, porque fue una historia totalmente nueva para mí, y pude disfrutarla igual a como disfruté de las adaptaciones.
Como buen clásico es una historia digna de ser leída, y la recomiendo muchísimo. Y si se animan a darle una oportunidad, les recomendaría que la leyeran en ésta edición porque además de una gran historia es una bella obra de arte, ya que Gabriel Pacheco, el ilustrador, hizo un trabajo fenomenal con las ilustraciones. Como ejemplo les dejo esa hermosa imagen de Baloo con Mowgli. Además que es en pasta dura y con hojas gruesas y súper resistentes, una edición con la mejor calidad.
Y aunque no soy muy fan de las historias cortas, porque suelo tardarme mucho en adentrarme a las historias y a familiarizarme con los personajes, y en las historias cortas cuando por fin me familiarizo con ellos la historia termina, disfruté mucho leyendo éste libro.
A pesar de que se dice que es un libro infantil, siento que es un libro perfecto para todas las edades. Ya que tiene escenas con bastante acción y peleas. Y pues es un clásico, por algo es un clásico. Por fin ya puedo tacharlo de mi lista de clásicos pendientes. Y de verdad, no le tengan miedo a los clásicos, son unas joyas de la literatura que se disfrutan muchísimo. Lo recomiendo totalmente.