El libro y sus antepasados (V): El pergamino

Por Murice Restauracion Y Mas @Murice14

Codex Argenteus, o "Biblia de Plata"

Según la tradición, se atribuye a la biblioteca del rey de Pérgamo al mérito de haber convertido en uso público la utilización del pergamino como soporte de escritura.

Ya desde los tiempos antiguos se había utilizado el cuero como soporte de escritura, en varios países utilizaron piel de animal, los egipcios, los judíos, los asirios y los persas. Pero solamente alrededor del siglo III a de C., se inició un nuevo tratamiento del cuero, de forma que se adoptase mejor para recibir la escritura, tal innovación sucedió en Pérgamo, por lo tanto el pergamino es un "papel" de piel animal convertida en hojas aplanadas y lisas que permitían su utilización óptima como material de escritura.
Para la preparación de pergaminos se utilizaban pieles de animales como la oveja, cabra, cordero y ternera; en Egipto se empleaban pieles de antílope o de gacela para obtener pergaminos de mejor calidad.
Para su utilización los pergaminos se purgaban introduciéndolos durante unos días en cal y mientras era flexible, se afeitaba por las dos partes para eliminar la grasa y quitarle las manchas, después se pulía con piedra pómez para alisarlo y se reducía al tamaño deseado.

Codex Argenteus


El pergamino destinado a los códices era más fino y pulido, dado que se utilizaba por los dos lados, mientras que el de los documentos se pulía sólo por un lado.
Los romanos acostumbraron a teñir los pergaminos de amarillo o de rojo, aparentemente porque su blancura se ensuciaba fácilmente. Para los códices de lujo se utilizó el color púrpura, con escritura de oro y plata, el más famoso fue el Codex argenteus, llamado de Ulfila, porque representaba los Evangelios traducidos a lengua gótica por el obispo Ulfila, escritos con letras de plata de forma uncial.
El Codex Argenteus, o "Biblia de Plata", de la Biblioteca de la Universidad de Uppsala, es uno de los manuscritos más famosos del mundo, y contiene el texto más extenso que se conserva en lengua gótica. Representa los restos de un lujoso evangeliario escrito a comienzos del siglo VI en el norte de Italia, probablemente en Rávena, para el rey ostrogodo Teodorico el Grande. El texto es parte de la traducción de la Biblia del griego al gótico que realizó en el siglo IV el obispo Ulfilas, el más antiguo conocido de los constructores no legendarios de alfabetos.
En la Alta Edad Media sé re utilizaba frecuentemente los pergaminos ya escritos para nuevos códices. Con este fin se borraba la escritura sumergiéndolos en leche y restregándolos con piedra pómez, son los llamados palimpsestos o codices rescripti. Se borraban igualmente textos profanos y sagrados, ya que a menudo estaban estropeados, mutilados o fuera de uso por su antigüedad.