La minuciosa investigación que el autor hace sobre cada cuadro engancha al lector hasta el último suspiro del relato. Los entresijos de los cuadros salen a la luz. El Maestro enlaza todas las historias de las obras de manera magistral. Todos los hilos se unen formando un verdadero tratado de arte.
El autor nos transfiere todos sus conocimientos en el Arte, haciendo que sea una obra realmente intensa pero fácil de leer. Realmente quién se enfrenta a la lectura de este libro, termina amando, o por lo menos es mi sensación, la infinidad de obras del Museo. Es un relato imprescindible.