EL MAPA DE LAS VIUDASAutor: Daniel Dimeco.Edita: Algaida ...

Por Moisés Moisés Cayetano Rosado @MoisesCayetanoR

EL MAPA DE LAS VIUDAS
Autor: Daniel Dimeco.Edita: Algaida Editores 2013. XVI Premio de Novela Ciudad de Badajoz. 311 páginas.
El novelista y dramaturgo Daniel Dimeco (Argentina 1969), se alzó con el XVI Premio de Novela Ciudad de Badajoz el pasado año, tras haber quedado con la misma obra entre los diez finalistas del prestigioso Premio Clarín, en su país.Desarrollada en los últimos momentos de la II Guerra Mundial por un lado y finales de verano de 1960 por otro, la obra sostiene un suspense y una tensión dramática que atrapa al lector, en un interés que no decae, y cuyos enigmas no se resuelven hasta las páginas  que cierran la narración. Las crueldades de la guerra y sus terribles consecuencias psicológicas quedan de manifiesto en la vida de Eleonora Maler -protagonista principal-, cuya locura, obsesiones, traumas, visiones terribles, son trazadas por Dimeco con crudeza y acierto.El ambiente opresivo del pueblo de la República Democrática Alemana, cerrado, pacato, en que se desarrolla la acción, no es solo un retrato realista de lo que ocurrió en la posguerra mundial, sino un símbolo representativo de lo que pasó y pasa allá donde se desenvuelve esa maquinaria que todo lo destroza -la  guerra-: pongamos en España, en esta tierra badajocense donde Daniel Dimeco se ha alzado con el Premio de Novela, con algunos años de adelanto a esas fechas en que transcurren los hechos narrados; pongamos en su suelo natal, Argentina, en los años setenta y ochenta de ese siglo XX tan convulso…El tiempo lento; los escenarios escuetos, desnudos, sencillos; los personajes que entran y salen de continuo en “escena”; los diálogos… nos sitúan dentro de un “ambiente teatral”, que Dimeco domina con maestría, avalada por sus obras y premios en este género.Las frases cortas, lapidarias, pulidas, secas en muchas ocasiones, me recuerdan a “El amante”, la célebre novela de Margarite Duras. También la autodestrucción de los personajes, aplastados por sus propios condicionantes históricos, ambientales, aunque la temática difiera.Además de ser un notable texto literario, la obra es un alegato contra la violencia general y contra la mezquindad particular, elevada al grado de sadismo en tiempos convulsos, e incluso en tiempos de remanso, cuando se pierde la vergüenza y se abandona la dignidad personal.Obra dura pero al tiempo dulce, por lo que tiene de necesidad de amor en los personajes, sobre todo en el central, esta mujer, Eliodora. Frágil, zaherida, quebrada en su persona y en su familia (marido e hija) por el terrible vendaval de los enfrentamientos que le arrastran como víctima, que arrastraron a tantos -miles, millones- como víctimas, aunque entre ellas también se revelara el papel de verdugo en los más cercanos, en los que debían ser aliados contra el “enemigo de fuera”, como ocurre en este “Mapa de las viudas” tan recomendable para leer y meditar. Como ha ocurrido en tantos enfrentamientos que nos son por desgracia bastante conocidos y cercanos.MOISÉS CAYETANO ROSADO