Todos queremos el gran tesoro. El de las historias de piratas. El de Barbarroja, el de Patapalo, Drake o cualquier otro, que el nombre no da oro. Ese tesoro que se nos mostraría en todo su esplendor tras arrostrar mil peligro siguiendo un viejo mapa encontrado entre las páginas de un libro o entre las últimas pertenencias de un anciano. Una cueva llena de joyas y doblones de la Corona de Castilla. Todos tenemos ese sueño.
Pero hay un mapa de tesoros en cada uno de nosotros. Unas cuantas pequeñas x negras marcadas en nuestra piel, aunque no las veamos. Hay un tesoro en cada sonrisa que entregamos por las mañanas, en los ascensores o al dejar sentarse a alguien en el metro. Hay un tesoro en cada mano que abrimos para palmear un hombro, para prestar ayuda, para empujar un poco. Existe en el café que nos tomamos con ese amigo para que vea las cosas menos grises, en la chorrada que soltamos para que todo parezca menos importante, en el oido que ponemos a quien necesita alguien que lo escuche. Esos son nuestros pequeños mapas del tesoro.
Muchas pequeñas acciones hacen grandes cosas. Nunca olvidemos eso. No somos pequeños, sólo somos muchos. Y la palabra es “juntos”. Juntar mi pequeña acción con la tuya, tu sonrisa con la suya, su mano abierta con las vuestras. Eso, ni más ni menos, nos propone Save The Children con “El mapa de las pequeñas acciones”: que sumemos, que seamos, que actuemos. Que no importe el tamaño de lo que hacemos, sino la causa por lo que lo hacemos. Mírate dentro esa x del tesoro y suma. Encontremos el tesoro.
Click here to view the embedded video.
Comparte Cosechadel66: Facebook Google Bookmarks Twitter