El Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas, guía de niveles

Publicado el 25 mayo 2017 por Comunicae @comunicae

Un nivel que, se trate de inglés o de cualquier otro idioma, puede partir desde un A1 y llegar hasta un C2. Son niveles establecidos en el Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas. Las A se refieren al “Usuario básico”, las B al “Usuario independiente” y las C al “Usuario competente”.

El marco de referencia sirve de herramienta de trabajo a todos los profesionales del ámbito de las lenguas modernas. Trata básicamente de facilitar la comunicación ofreciendo una base común para el desarrollo curricular, la elaboración de programas, exámenes y criterios de evaluación. En academias como Eurolingua el alumnado puede prepararse para, de forma progresiva, ir superando los sucesivos niveles. Niveles que determinan el nivel de dominio de determinada lengua. Entre marco, parte esencial del proyecto general de política lingüística del Consejo de Europa, es también una manera de fomentar la transparencia de los cursos, los programas y las titulaciones en el campo de las lenguas modernas.

No se pueden confundir los términos de plurilingüismo y multilingüismo. Este último se refiere al conocimiento de varias lenguas o a la coexistencia de varias en la sociedad. Por su parte, el plurilingüismo promueve que las personas conozcan no solo la lengua en sí, sino también su contexto cultural. Teniendo en cuenta que las lenguas se relacionan entre sí e interactúan, está claro que una persona puede valerse de sus conocimientos de varias lenguas para dar sentido a un texto. De hecho, muchas palabras pertenecen a un fondo común internacional, algo de lo se percatará cuaquier persona que estudie en una escuela de idiomas en Santiago de Compostela.

El Marco Común Europeo incluye seis niveles amplios que cubren el espacio de aprendizaje de las lenguas europeas. El primer nivel es el de “Acceso” (Breakthrough). Le siguen el de “Plataforma” (Waystage), el de “Umbral” (Threshold), el “Avanzado” (Vantage), el “Dominio operativo eficaz” (Effective Operational Proficiency) y la “Maestría”. Esta última se corresponde con el objetivo más alto de los exámenes en el esquema adoptado por ALTE (Association of Language Testers in Europe).

En definitiva, el Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas delimita las capacidades que se deben controlar en cada uno de los niveles. Se trata de comprender, hablar y escribir. Por lo tanto, en las pruebas oficiales, como los exámenes de Cambridge o los de Oxford, se pulsan destrezas como la comprensión auditiva y lectora; la interacción y expresión oral y la expresión escrita.