El Marozi: ¿León moteado de montaña?

Publicado el 28 marzo 2013 por Sergio Álvarez @sergio203bio
El primer encuentro documentado con el marozi data de 1931, cuando un granjero de nombre Michael Trent abatió dos leones moteados de pequeño tamaño en la cordillera de Los Aberdares (Kenia) a una altitud de unos 3.000 metros. Dichos leones fueron exhibidos como trofeos, llamando la atención del Departamento de Caza de Nairobi debido a sus inusuales pieles moteadas. Las crías de león tienen la piel moteada como método de camuflaje, sin embargo pierden esas manchas al llegar a la edad adulta. Lo que llamaba la atención de estos dos leones una vez que fueron examinados más a fondo es que tenían una edad demasiado avanzada para retener un pelaje moteado.
Las primeras noticias de la existencia de leones moteados llegaron a oídos de los occidentales a través del Coronel Richard Meinertzhagan, quien había escuchado varios testimonios de los marozi entre 1903 y 1908 en las montañas de Kenia. Esos testimonios fueron entendidos más bien como un mito propio de los nativos de aquellas tierras. En 1924 el Capitán A. Blayney Percival informó haber cazado a una leona y sus cachorros, los cuales eran todos moteados. Afirmó que la leona tenía una piel con rosetas bien visibles, al igual que sus cachorros. Cabía la posibilidad de que algunos individuos retuvieran sus manchas juveniles mucho más tiempo de lo habitual. En 1931 el Capitán R. E. Dent, guardabosques keniata a cargo de la Sección de Pesca, observó 4 leones moteados que cruzaron el camino delante de él, a unos 3.000 metros de altitud. Según afirmó más tarde, parecían más oscuros y más pequeños de lo habitual, se trataba de un tipo muy diferente de león. Dent no le dió mucha importancia a este avistamiento hasta que, unos meses después, varios de sus empleados le comunicaron que habían atrapado a un animal que no era ni un león ni un leopardo, sino que parecía un cruce entre ambos. Por razones desconocidas no fueron capaces de traer de vuelta al animal, y no pudieron conservar su piel.

Idealización de el marozi por Bill Rebsamen. Shukernature.com.

Volviendo al primer caso documentado, es decir, a los 2 leones abatidos por Trent en 1931, eran un macho y una hembra, aunque la melena en el macho era muy escasa, casi inexistente. A partir del tamaño de las pieles se determinó que su edad era de al menos 3 años (es decir, la edad púber). Dichas pieles eran moteadas, a pesar de que los leones pierden sus manchas mucho antes de los 3 años de edad. Las citadas manchas no mostraban signos de decoloración. La falta de un esqueleto, o al menos de un cráneo, hizo que los funcionarios del Departamento de Caza keniata no pudieran llegar a un veredicto acerca de la edad exacta de los 2 individuos o de la especie a la que pertenecían. Kenneth Gandar Dower, un cazador de caza mayor, examinó las pieles de Trent y escribió sobre ellas: "Parecen pertenecer a leones de 2 ó 3 años. Las rosetas con las que nacen la mayoría de los leones no muestran signos de decoloración en ellos. Algunos especímenes inusualmente mantienen sus manchas hasta una edad avanzada, pero no en un grado comparable a estos 2 ejemplares, con rosetas no sólo distribuídas por las piernas y los flancos, sino por todo el cuerpo".
Precisamente Kenneth Dower fue el primero en liderar una expedición para encontrar al marozi, convencido de que debía existir en la región una especie de felino aún desconocida para la ciencia occidental. Sin embargo, en sus expediciones Dower sólo fue capaz de encontrar rastros y otras pruebas circunstanciales de la existencia de estos animales. Las huellas de mayor tamaño que encontró eran demasiado grandes para tratarse de un leopardo, pero demasiado pequeñas para ser de un león, y no encajaban con la hipótesis de un león joven, ya que aquellos animales parecían haber estado acechando a un búfalo, por tanto debía tratarse de ejemplares adultos. No mucho tiempo más tarde, fueron encontradas otras huellas a una altitud de unos 3.800 metros. Tras examinarlas, determinaron que pertenecían a un macho y una hembra de marozi, entre otras cosas debido a la gran altura a la que fueron encontradas. Un guía keniata de la expedición había descrito a Dower su encuentro con 2 marozi dos semanas atrás. Según él eran un macho y una hembra que se encontraban jugando en el sol y eran más pequeños y de constitución más esbelta que sus parientes de las llanuras.

Piel de uno de los leones moteados cazados por Trent. Publicada en el libro "The spotted lion" de Kenneth Gandar Dower (1937).


La publicación de el libro "El león moteado" por Dower atrajo gran atención y sacó a la luz nuevas pruebas. La más interesante vino de la mano de G. Hamilton Snowball, quien recordó en una carta a la revista "The Field" una aventura vivida en la cordillera de Los Aberdares. Había abatido un animal que en principio parecía ser un leopardo, sin embargo se dió cuenta de que era demasiado grande y oscuro. Sus guías nativos le indicaron que se trataba de un "damasia", no de un "chui" (leopardo). Según ellos era tan diferente de un leopardo como un león lo era de un marozi. Hamilton les preguntó qué era un marozi y ellos inmediatamente le respondieron que se trataba de un animal más pequeño que un león, que generalmente era visto en parejas, aunque esto ocurría en pocas ocasiones y normalmente a grandes alturas. Más tarde, en la primavera de 1923, Hamilton asegura haber visto junto a sus guías nativos a 2 marozi a una altura de unos 3.500 metros. Los guías reconocieron inmediatamente a los animales, quienes asustados por los humanos se escondieron rápidamente en la espesura del bosque. Investigaciones posteriores dieron a conocer que los nativos locales hacían una clara distinción entre simba (león) y marozi (león moteado de montaña). Afirmaban que los leones nunca subían a tales alturas, sin embargo las altas montañas eran el hábitat del marozi.
HIPÓTESIS SOBRE EL MAROZI

1) Híbrido entre especies. Los casos de hibridación entre el león y el leopardo están bien documentados en cautividad, y la descendencia muestra unos rasgos que encajan bastante bien con el aspecto que debe tener un marozi. Sin embargo, no se ha documentado el cruce entre estos animales en estado natural, donde se supone que sería mucho más difícil debido a varias razones, como el estilo de vida diferente de ambas especies.

Aspecto de un leopon (híbrido entre leopardo y león). Foto de Kent Gavin. Shukernature.com.


2) Aberración genética. El aspecto del marozi puede ser resultado de la expansión de un gen recesivo en una población de leones como consecuencia de una elevada tasa de endogamia. Esta mutación haría que los leones retuviesen sus manchas en la edad adulta y sería causa también del menor tamaño de los individuos. Sin embargo, esto no explicaría su preferencia por el bosque en lugar de sabana y las elevadas alturas en las que habita.
Robert Foran, en un artículo publicado en "The Field" en 1950, sugiere que el marozi podrían ser ejemplares de león somalí (Panthera leo somalica), una variedad de león más pequeña, más pálida y con melena más escasa que otros leones africanos, que habían establecido una población en la región de Los Aberdares (Kenia) y entre los cuales había algunos individuos aberrantes que retenían una piel moteada en la edad adulta.
Según el zoólogo Karl Shuker se trata de la evolución de una versión de montaña del león, especialmente adaptado a vivir en los bosques, en los cuales su pelaje moteado, menor talla y la casi ausencia de melena en el macho serían caracteres favorables para tener éxito en la caza en dicho tipo de hábitat.
3) Individuos subadultos. Parece no ser una hipótesis muy consistente debido a que se han encontrado ejemplares de edad adulta que retenían su pelaje moteado.
4) Un nuevo taxón. El criptozoólogo belga Bernard Heuvelmans propuso en 1955 que el marozi era una nueva especie a la que bautizó con el nombre de Leo maculatus.


Otra imagen de un leopon. Messybeast.com.



El marozi es poco recordado hoy en día y puede que no haya sobrevivido más allá de la mitad del siglo XX, ya que desde los años 40-50 de dicho siglo los informes sobre avistamientos son prácticamente inexistentes.
Más información sobre el marozi:
Vídeo de youtube sobre el marozi
http://www.cryptozoology.com/cryptids/marozi.php
http://www.messybeast.com/genetics/lions-spotted.htm
http://www.lairweb.org.nz/tiger/marozi.html
http://karlshuker.blogspot.com.es/search/label/marozi
Híbridos entre leopardos y leones