Si ya conocíamos a Javier Vielba de sobra en sus facetas Arizona Baby y Corizonas, sólo nos quedaba verlo en su versión solitaria con el apelativo de El Meister. Y si ya nos gustaban las dos primeras, no podía fallar la tercera. Y así fue la otra noche en la sala Potemkim, hogar de acogida del ecléctico y polifacético artista pucelano.
Si ya conocíamos a Javier Vielba de sobra en sus facetas Arizona Baby y Corizonas, sólo nos quedaba verlo en su versión solitaria con el apelativo de El Meister. Y si ya nos gustaban las dos primeras, no podía fallar la tercera. Y así fue la otra noche en la sala Potemkim, hogar de acogida del ecléctico y polifacético artista pucelano.