Ambos aeropuertos están también comunicados por metro con el centro de la ciudad, por lo que se puede llegar en un momento. La ventaja de los aeropuertos es también que puedes acceder sin problemas con tu coche, cosa que no pasa con las estaciones de tren.
Hay tantos vuelos regulares como trenes al día y además tienes el puente aéreo, un servicio super recomendable para las empresas, ya que sus empleados pueden ir al aeropuerto tanto si su reunión termina pronto como si termina tarde.
Hay un montón de compañías que hacen el trayecto, ya sean low cost, como regulares y tienes clase turista y business, la oferta es amplia. Así, ¡nunca había sido tan fácil volar entre Madrid y Barcelona!