El método 15/33 de Shannon KirkAutoconclusivo | Ediciones B | 368páginas
Cómpralo enAmazon, añádelo a Goodreads Imaginad a una chica de dieciséis años, embarazada y vulnerable, a quien acaban de arrancar de la tranquilidad de su hogar para arrojarla dentro de una furgoneta destartalada. Raptada… Sola… Aterrorizada.
Ahora, olvidaos de ella.
Imaginad en cambio a una prodigiosa manipuladora de dieciséis años que, desde los primeros instantes de su secuestro, se centra, con tanta serenidad como determinación, en dos cosas: salvar al niño que lleva en su seno y vengarse.
Metódica y calculadora, pone a punto un plan organizado de manera casi científica en el que nada está librado al azar. Su férrea voluntad y su ingenio serán sus mejores armas contra la brutalidad de sus raptores, y lo único que le falta por hacer es esperar el momento ideal para lanzar su ataque.
El método 15/33 es un libro que me llamó la atención cuando supe que se iba a publicar en España. Lo primero que captó mi atención fue su portada, con un halo de misterio y algo oscuro que hizo que enseguida leyera la sinopsis. Al terminarla me pareció una historia que me podría gustar y, ya de paso, cambiar un poco de género, algo que me gusta hacer de vez en cuando. Y escogí este libro por pura curiosidad, sin tener muy claro que esperarme.
Al principio tuve el problema de llevar una idea que no era. Pensaba que al ser de secuestro me encontraría a la chica asustada y mostrando continuamente un montón de sentimientos orientado a todas las personas que conoce y a su propio hijo. Sin embargo me encontré todo lo contrario: una chica embarazada con un interruptor capaz de apagar sus emociones, lo que la hace ser fría y calculadora, llevando la historia por un camino que, una vez sobrepasada la fase inicial en la que no me hacía mucha gracia tanta frialdad, después la agradecí y me gustó verlo desde un punto de vista totalmente diferente, haciendo que el libro no sea una historia de un secuestro, sino algo que va más allá.
Volviendo a la idea, el problema por lo que al inicio no le di muchas esperanza es que la protagonista no tiene sentimientos. Bueno, eso es algo fuerte, más bien puede elegir no tenerlos, lo que hacía que en situaciones en las que debería encontrarse sufriendo, me topara con una chica con un comportamiento nada habitual en ella. Esto hacía que me quedara impasible respecto a los que a sentimientos o emociones se refiere. Sin embargo, sobrepasado ello, supe orientar mi visión del libro desde otra perspectiva, desde la que la autora lo quería mostrar, y es ahí cuando me volqué en el libro y realmente lo disfruté.
La protagonista es una adolescente físicamente y una sociópata psicológicamente. Es una chica inteligente, sarcástica y dura de roer, y la he adorado por completo. Si bien al principio no me hacía gracia porque es un personaje que no está hecho para simpatizar con él. conforme avanzaba la historia me gustaba más y más, hasta llegar a ese final, ver su dureza y llegar a admirarla y respetarla por su manera de pensar, por su frialdad y por su forma de lograr lo que quiere a pesar de las duras situaciones, además del sarcasmo que muestra en su mente hacia su captor.
Eres tan predecible, pedazo de animal. ¿Tirarme? Sí, claro. Perderías este chollo de trabajo que tienes.
Lo que me ha gustado es el personaje tan extraño y diferente que ha introducido. Muestra un secuestro poco convencional desde el punto de vista de una mente extremadamente científica. Por ello se pierde el sentimiento que se pudiera tener respecto a la situación, pero por otra parte nos muestra el secuestro desde una perspectiva fría y calculadora, algo que me resulta novedoso y que me ha convencido. Los únicos personajes que he visto de este estilo han sido psicópatas, y me ha sorprendido encontrarme a esta chiquilla. Es como imaginarse a Sherlock secuestrado o una versión de secuestro de Naúfrago.
Aunque los personajes aquí no son muy centrales sino que aparecen por conveniencia, hablaré de aquellos en lo que me he fijado especialmente por alguna razón. Tenemos a los secuestradores, un par de personajes que... son para verlos. Uno es un secuestrador de pacotilla, lo hace todo con rabia y sin pensar mucho en las consecuencias, lo que le lleva a actos no muy inteligentes por su parte. Además le da a la chica una radio, televisión y lápices para colorear. Teniendo en cuenta el poco interés que tiene por el bienestar de la chica en general que le de estos objetos es algo demasiado inverosímil. No sé que se le pasó a la autora por la cabeza para hacer esto, es un pequeño detalle que prefiero obviar para que la historia quede mejor, porque carece de lógica. El otro secuestrador es el inteligente del grupo, inteligente por decir algo. Es muy raro, una versión de Wilbur pero como si fuera malo. En un momento hablaba con diminutivos y de forma pomposa como Wilbur y a la otra perdía el nervio y gritaba. Lo cierto es que me han parecido muy curiosos estos malos, son diferentes, extraños y me han gustado porque además te muestra algún momento de su pasado y es cuando entiendes que no pueden estar muy bien de la cabeza. A pesar de no ahondar suficiente en ellos, la autora comenta lo suficiente para hacer que los malos se queden en tu mente por sus peculiaridades y por ser personajes bien construidos sin la necesidad de contarte toda su vida.
Por último hablaré del otro narrador, el detective Liu. Ese es su apellido, no recuerdo su nombre. El detective es un personaje que tampoco es especialmente afectivo y no hace que el lector simpatice con él. Sin embargo, tanto él como su compañera Lola forman un equipo peculiar, serio y con ganas de pillar a los malos y hacerlos sufrir. Lo que me ha gustado es que no son los típicos polis buenos que siguen las normas a rajatabla. No, son policías que quieren hacer justicia, su justicia y no pararán hasta lograrla. Esto hace que se conviertan en personajes muy implicados en su trabajo y que nos muestre el avance de la investigación.
Otra peculiaridad del libro es su narración. El libro se encuentra narrado como un diario que la protagonista escribe cuando es mayor sobre cómo fueron sus días, de manera que te cuenta determinados días y, a veces, te recuerda que está escribiendo esto 17 años después, haciendo pequeños saltos en el tiempo para contarnos una historia más consolidada o haciendo breves comentarios de su vida actual. Algo similar ocurre con la parte del detective. Todo se encuentra escrito como si fuera una historia que se estuviera contado. Por este mismo motivo el diálogo no abunda sino que se utiliza en algunos casos pero por lo general nos guiamos a través de la voz cantante en ese momento, describiéndonos lo que hace él o ella, lo que hacen las personas que les rodea y los pensamientos y sentimientos que tuvieron cuando ocurría lo que nos cuenta.
La perspectiva del secuestro ya os he comentado que no es la de un secuestro convencional y por ello lo que más me ha gustado del libro es la forma de impartir justicia. El hecho de que la protagonista fuera pensando poco a poco en como escapar y, cuando está fuera, los sentimientos de odio que tiene así como la forma en la que se ejecuta todo... Me ha encantado, por completo. Si buscas una historia del tipo policíaca con leyes no sigas por aquí, pero si quieres algo más auténtico, algo que despierte tus instintos de supervivencia, lee el libro.
En definitiva, El método 15/33 es un libro diferente, ágil y con unos personajes con los que puede que no simpatices, pero te asombrarán como están construidos. Una historia que va más allá de un simple secuestro o una sola investigación. Tenéis que conocer a la protagonista y respetarla por su modo de operar en todas y cada una de las situaciones de este libro. Estoy segura de que no os dejará indiferente.