El método de los seis sombreros

Por Filossofo

Sombreros [Wikimedia]

El conocido método de los seis sombreros es una propuesta del prolífico escritor y psicólogo de Oxford, Edward de bono. Parte de la premisa de en un debate utilizamos demasiada energía tratando de derrotar al contrincante y muy poca energía tratando de encontrar la verdad.
Ciertamente, esta visión esta muy de acuerdo con lo que hemos venido conociendo de la retórica en los artículos anteriores; está de acuerdo con la idea de que el objetivo del debate es convencer al público, sin importar que tengamos la verdad en nuestras manos, y eso es muy útil en muchas situaciones, pero no siempre desearemos tener la razón, a veces deseamos solucionar un problema o encontrar una idea nueva, qué hacer entonces?. Debemos dejar el debate a un lado (para cuando necesitemos convencer) y buscar un método alternativo, éste es uno de esos métodos.
Es un método simple, la idea es que necesitamos una imagen que nos permita representar diferentes tipos de pensamiento, y de acción, así nos será posible guiar nuestro pensamiento de manera consciente, reduciendo la confusión y aumentando la eficacia de la manera en que pensamos acerca del problema que nos traemos en mente.

Exactamente, de qué se trata?

Existen seis sombreros (imaginarios) que se diferencian por su color, cada uno tendrá una función, una forma de pensar cuando lo tenemos 'puesto'. Los colores de los sombreros son: blanco, rojo, negro, amarillo, verde, azul. Cada uno habrá de estar asociado a un tipo de pensamiento de la siguiente manera:
  • Blanco: Información, cuando tenemos el sombrero blanco debemos pensar como computadoras, transmitir solamente hechos, información pura y objetiva.
  • Rojo: Emociones, cuando nos ponemos el sombrero rojo es válido hacer observaciones emocionales y subjetivas, el miedo y la avaricia son válidas y no es necesario justificar esas emociones de manera racional (para eso están los sombreros blanco y negro).
  • Negro: El sombrero negro recuerda a un juez, es duro e imparcial, cuando nos lo ponemos debemos pensar en los peligros, en los aspectos negativos de la cuestión, debemos ser críticos y escépticos acerca de cada aspecto de la cuestión.
  • Amarillo: Optimista por naturaleza, no repara en los aspectos negativos de nada, observa sólo lo positivo, lo ventajoso, lo benevolente de cada aspecto de la situación.
  • Verde: Creativo por excelencia, busca alternativas y soluciones nuevas, cuando nos ponemos el sombrero verde hemos de buscar ver las cosas desde nuevos y variados enfoques.
  • Azul: Inteligente y pragmático, piensa sobre el pensamiento, y trata de dirigir a los otros sombreros.

Las parejas de sombreros

El lector atento habrá notado que existen maneras de agrupar los sombreros según su función para que cubran un determinado campo de acción del pensamiento, por ejemplo en parejas:
  • Información: Desde el enfoque de la información, se puede cubrir gran cantidad de terreno desde los sombreros blanco y rojo. Si lo que se quiere es contemplar todos los elementos que corresponden a un tema determinado, es allí donde debemos referirnos.
  • Juicio: Si lo que se quiere es sopesar la validez de una idea o la efectividad de una solución hemos de recurrir a una combinación de los sombreros negro y amarillo, para estar seguros de tomar en consideración los aspectos negativos como los positivos en lo que nos atañe.
  • Control: Si deseamos un completo control sobre el flujo y cantidad de ideas en el pensamiento en determinado momento, debemos recurrir a los sombreros verde y azul, con el verde para generar muchas alternativas y con el azul para gestionar eficazmente esas alternativas.

Las críticas

Como toda técnica tiene sus defensores y sus detractores, las críticas más habituales serían:
  1. No existen estudios científicos que la avalen. Ciertamente, se la utiliza mucho en el campo empresarial pero, que yo sepa, no existe ningún estudio científico que asegure su eficacia (salvo los del propio de Bono)
  2. Una crítica común a todas las técnicas de pensamiento creativo es que se podría necesitar ser creativo desde el principio para poder utilizar la técnica.
  3. Fue diseñado en los 80' y no se lo ha actualizado a las tiempos que corren (hay que poner atención a que la psicología pasaba una época un tanto anticientífica de 'todo vale').

Las Ventajas

  1. Es divertida de practicar en grupo, no deja el ambiente cargado de hostilidad como el debate.
  2. Es fácil y se puede proponer como una especie de juego en las decisiones conjuntas.
  3. Las discusiones se solucionan rápidamente con este método, se obtienen soluciones eficaces mucho más rápido que con los debates.
  4. Se puede combinar fácilmente con otros métodos como el mapeo mental.

Lo interesante

Posee muchos aspectos interesantes, como el hecho de ir muy de acuerdo con la teoría de sistemas y lo que se conoce del funcionamiento de las redes. El problema de la falta de evidencia científica que lo avale queda un poco subsanado al aclarar que también es verdad que, como método, no contradice al método científico ni persigue sus fines; también está de acuerdo con el análisis y el pensamiento racional, al cual considera muy útil, tanto como para incluir el sombrero blanco y el sombrero negro.
A manera de síntesis debo dejar claro que la única manera de probar el método es comparándolo con otros en la práctica, es decir, probando cada uno en la resolución de problemas similares y viendo su eficacia.

Notas:
  1. Les debo los ejemplos de cómo funciona, hay algunos en las referencias.
  2. Los sombreros son tremendamente útiles, muchos de los mecanismos de acción que se pueden formar con ellos se estudiarán en artículos posteriores, pienso que en el próximo trataré la técnica de poda.
Referencias:     Edward de Bono     El método de los seis sombreros