El mito al desnudo

Publicado el 27 octubre 2019 por Jmartoranoster

Maryclen Stelling

Los acontecimientos que actualmente tienen lugar en Chile echan por tierra una serie de mitos sobre el modelo de desarrollo económico, la estabilidad política y la mejor democracia de la región, entre otros.
Al igual que en Ecuador, éste ha sido un caso emblemático en cuanto a dinámicas de participación social; una rica circulación y alimentación mediática de informaciones y contenidos; la construcción colectiva de una narrativa transmedia sobre la verdadera situación chilena. La navegabilidad interactiva y la circulación por redes sociales -mediante dispositivos móviles- de relatos e informaciones sobre lo que acontecía en tiempo real.
Una crisis supuestamente provocada por el alza de la tarifa del transporte público, se torna en un potente movimiento social de denuncia y reivindicativo. Las narrativas transmedias desnudan la situación chilena y, en especial, a los responsables de “la fractura social”, económica y humana que disparó el estallido. Narrativas que cuentan un Piñera “en guerra”, intentando construir un relato ganador y mantener intocables las estructuras económicas y de poder de un “capitalismo oligárquico” a la chilena. Una primera dama, expresando el temor a perder sus “privilegios” de clase. Muy especialmente, convivimos transmediáticamente con un pueblo al límite de su capacidad de tolerancia, gritando al mundo la verdad del modelo chileno y denunciando ese pinochetismo profundamente enquistado en sectores dominantes. Vivimos y sufrimos el relato de una brutal represión militar.
Participamos a través de lo racional y lo afectivo en dolorosas construcciones narrativas de contenidos audiovisuales y documentales. Fungimos de interlocutores y productores de una narrativa compleja en torno a la represión del pueblo chileno. Compartimos activamente relatos de persecuciones, disparos, golpes y porrazos; heridos y muertes; violaciones y abusos de todo tipo. Conocimos de los desmanes, excesos y tropelías de las fuerzas del orden, quienes, además de reprimir violentamente, incendiaban y saqueaban. Conectamos mediante los afectos y las emociones con historias y vivencias de ese pueblo valiente devenido en protagonista de su propia historia.
Participamos en tanto productores y consumidores de contenido en el desmontaje del mito chileno
@maryclens