El Monte de Saint-Michel en Enredados

Por Martineznotte Alejandro Martínez Notte @martineznotte

Una joya histórica

Esta increíble isla en la Región Baja de Normandía se convirtió en la inspiración de un escenario de cuento de hadas. La peculiaridad de esta comuna es que la isla contiene un gran monte sobre el cual se costruyeron algunas de las joyas arquitectónicas más importantes del periodo romántico y gótico.

A lo largo de la historia el Monte Saint-Michel se convirtió en cárcel, en comunidad monástica y en poblado, hasta llegar a ser el grandioso legado arquitectónico que se conoce en la actualidad. Esta historia de cambios y evolución dota a la isla de un gran misticismo que hace de ella uno de los destinos turísticos más visitados de la Bretaña Francesa.

Consientes de este enigmático poder, los productores de Disney encargados de la película Enredados no dudaron en visitarla y utilizarla como inspiración del Palacio Real donde la princesa Rapunzel es capturada.

El Palacio Real es el Monte Saint-Michel

El hecho de que el monte se encuentre elevado 57 metros sobre el nivel del mar, rodeado desde sus bahías por el Océano Atlántico, convirtió este destino en el sitio ideal para mantener capturada a una princesa sin dejar de lado el encanto y la elegancia propia de las edificaciones reales. Los últimos retoques del castillo diseñado por los artistas de Disney encuentran su influencia en las edificaciones locales, como la Iglesia pre-romántica del siglo XI y la Iglesia Abacial del siglo XV, dos ejemplos de arquitectura religiosa que manifiestan la transformación estilística del medioevo.

La Torre de St. Gabriel, que se encuentra en la cima del Monte, recuerda a la Torre donde mantienen captiva a la princesa. Desde este sitio el personaje podía visualizar la costa y ver el imponente espectáculo de linternas que daba la ciudad en su honor.

Las imágenes que ilustran este artículo pertenecen a Fougerouse Arnaud.