El Mosaico Binario

Publicado el 20 abril 2015 por Habitalia

Estas dentro de un cuarto con sólo dos puertas y con dos hermanas gemelas. Si sales por la puerta equivocada te matan, y si sales por la correcta, vives.

El problema es que sólo puedes hacer una pregunta, a sólo una de las gemelas. Además una de ellas siempre miente, y la otra siempre dice la verdad, pero tú no sabes cuál es cual.

Hay solo una pregunta que puedes hacer, y esa pregunta siempre te hará salir por la puerta en la cual vives. ¿Cual sería la pregunta?

Lógicamente no daré la respuesta, ya que la idea de este acertijo que tiene muchos binarios implícitos, es que cada uno pueda llegar a ella, luego de un análisis, y es por ello que pido a los QQ:.HH:. que la sepan, no la develen al emitir sus comentarios.

Sin mas preámbulo, pasaré a definir dos conceptos:

1. Mosaico: del latín mosaicum, se dice de la obra taraceada de piedras o vidrios, generalmente de varios colores.

2. Binario: del latín binarius, compuesto de dos elementos, unidades o guarismos.

Cuando hacemos nuestro ingreso al templo, debemos atravesar dos columnas y vernos enfrentado al mosaico binario que llega hasta el ara. No es casualidad que aquellas baldosas tengan ese tamaño, ya que con ello nos recuerdan que al pisarlas debemos tomar conciencia que nuestros pies jamás estarán apoyados en un 100% en el blanco o en el negro, sino que pisamos parte de blanco y parte de su opuesto.

El pavimento mosaico es, sin duda, un símbolo de la manifestación que efectivamente está determinada por la lucha y delicado equilibrio que entre sí sostienen las energías positivas, masculinas y centrífugas, también llamadas yang o luminosas, y las energías negativas, femeninas y centrípetas o conocidas como yin y oscuras, expresadas también en la alternancia de los ritmos y ciclos de la naturaleza y el cosmos. Esas mismas energías están representadas por el Sol y la Luna, que en la Logia se encuentran presidiendo el Oriente, a uno y otro lado del Delta luminoso.

Recordaremos que el color blanco simboliza las energías celestes, y el color negro las terrestres; las primeras se oponen a las segundas y viceversa, al mismo tiempo que se complementan y conjugan, atraídas como los polos positivo y negativo de un imán, determinando en su perpetua interacción, el desarrollo y la propia estructura de la vida cósmica y humana; esa estructura se genera igualmente por la confluencia de un eje vertical -celeste- y otro horizontal -terrestre- ejemplificados en el pavimento por las líneas transversales y longitudinales, conformando un tejido o trama cruciforme, un cuadriculado, que refleja las tensiones y equilibrios a que está sometido el orden de la creación.

Asimismo, también puede equipararse la vertical al tiempo y la horizontal al espacio, el primero activo con respecto al segundo, al que moldea permanentemente, es decir, a las dos coordenadas que establecen el encuadre que permite la existencia de nuestro mundo y de todas las cosas en él incluidas.

La idea de ese orden está ya implícito en el significado de la palabra "mosaico", que deriva del griego museion, literalmente "templo de las musas", expresión ésta que conviene perfectamente a la Logia masónica, en donde como estamos viendo cada una de sus partes y la totalidad de su conjunto constituyen una síntesis simbólica de la armonía universal.

El mosaico binario, cuyo tema nos convoca el día de hoy, por una parte nos habla de la delimitación de los mosaicos, que simbolizan el mundo donde nos movemos en su juego dual y por otro lado la igualdad de sus mosaicos, nos recuerda que los hombres en esta tierra somos todos iguales sin importar el color de la piel, su economía, raza o credo, solo destacados por sus virtudes y capacidades, es a su vez también el juego, no de los contrarios sino de los complementos, tales como el día y la noche, lo bueno y lo malo, es la manifestación universal del G:.A:.D:.U:. en su forma dual.

La imagen de este tablero nos lleva a nuestra conciencia, refiriéndose a lo anteriormente expuesto, lo perfecto y lo imperfecto coexistiendo en el mismo lugar, como blanco y negro, quedando a nuestro libre albedrío escoger entre los caminos que formen nuestra senda propia en la vida y así encontrar la libertad, la igualdad y la fraternidad por medio de la justicia en paz y con armonía, luchando contra los vicios y trabajando las virtudes.

Podemos visualizar las acciones de los hombres como las distribuciones de las piedras de Weiqi, juego chino de mas de 5.000 años de antigüedad, y la vida misma como un juego continuo en el que se gana y se pierde; en el Weiqi el secreto no está en ganar sino en ser parte del juego.

Como podemos ver, el centro de la Logia, se considera como la simbiosis entre el espíritu y la materia, la unidad de los pueblos, la dualidad del bien y el mal, la convivencia armónica entre las razas, la diversidad de los seres, tanto animados como inanimados, es la representación alquímica del azufre y del mercurio.

Los mosaicos con su forma cuadrada, o dobles triángulos rectángulos como queramos llamarlos, nos refieren las virtudes: templanza, fortaleza, prudencia y justicia dándole significados morales.

Pero también representan los cuatro elementos tierra, agua, aire y fuego, a su vez también, los cuatro puntos cardinales que ubican la dirección de la logia, generadora de la rosa de los vientos o brújula que nos permita reconocer el sendero a seguir.

Para la masonería el bien y el mal, la verdad y el error, la ignorancia y la sabiduría, lo objetivo y lo subjetivo, lo esotérico y lo exotérico, etc. son expresiones de la realidad con las que tenemos que vivir. Se encuentran como dos columnas colocadas en cada uno de nuestros flancos, las columnas B y J representan dos pares opuestos, la primera consagrada a la belleza y la segunda a la fuerza. Pero la clave esta en aprender a mantenerse en equilibrio entre estas dos partes de la realidad.

La fe y la esperanza eran blancas entre los antiguos, blanco era el color de Júpiter, padre del día y negro el de Plutón, rey de las oscuras tinieblas. En Roma le dedicaban el segundo mes del año y dentro de él, en su segundo día se realizaban los sacrificios. En las ceremonias del antiguo Egipto los sacerdotes vestían de blanco.

Según la teoría pitagórica el binario es el símbolo de la diversidad, de la desigualdad, de la división, de la separación y de las vicisitudes que provienen del estado imperfecto en el que cae el hombre cuando se desconecta de Dios, lo cual es un contrasentido que veremos mas adelante.

El contraste entre el blanco y el negro, ligados por el mismo cemento, dan la imagen del bien y del mal que nos presentan los senderos de la vida. También recuerda la pureza del sentimiento o el alma pura del iniciado intentando sobreponerse a los rencores, vicios y pasiones a que está sujeto el profano. El negro no refleja los rayos luminosos y su oscuridad despierta sentimientos de destrucción y muerte. El blanco, -unión de los siete colores del espectro solar- es luz, creación y vida, y por ende debiera ser la esencia del Gran Arquitecto del Universo, pero ya veremos otra arista de esta idea: "La sabiduría que emana de Dios, es la blancura resplandeciente de la luz eterna" canto el Rey Salomón, sin darse cuenta del error que cometía.

DESARROLLO

Los filósofos presocráticos, Parménides y Heráclito expresaron ambos dos afirmaciones opuestas, pero ambas verdaderas según su punto de vista.

Parménides decía que sólo hay un Ser y que éste Ser es inmutable. De todo cuanto existe lo primero y principal que podemos decir es que "ES". Ese ser, es único en todo cuanto existe.

Por el contrario, Heráclito decía que el Ser no existía porque "todo está en permanente cambio". Lo único que existe es el cambio; por eso, aquello tan conocido de que "nadie se baña dos veces en el mismo río". El río está en constante cambio.

Cientos de años antes que estos filósofos griegos, los Vedas de la India, ya discutían sobre la Realidad "dvaita" y la "advaita". O sea la realidad dual, dvaita y la no dual, advaita.

El filósofo existencialista Heidegger en su libro "Ser y tiempo" se plantea la pregunta "¿Qué es el Ser?, ¿Qué es lo que ES?", preguntas llenas de sentido. El mismo se contesta que el Ser es "lo inmediato indeterminado", la raíz de la que todo está constituido.

Curiosamente, en el siglo V de la Era profana, el máximo y más autorizado comentarista de los Vedas, Sankara, comienza su investigación filosófica con la misma pregunta que Heidegger. Este filósofo existencialista, trata de explicar que la auténtica existencia humana consiste y ha de orientarse hacia la realización del Ser.

Aunque en el conocimiento sensorial, hay una aparente separación entre el sujeto y el objeto, él nos habla de la "no-separación", por la identificación del sujeto, es decir la conciencia, con el objeto.

Heidegger describe el Ser y Sankara a Brahman como UNO, indeterminado, e indivisible. Pero este Ser o Brahman se está expresando en el mundo de infinitos modos y con infinitas formas. La dualidad o multiplicidad es por tanto de "lo accidental", de las formas, de la "no realidad". Dicen que es como si el Ser se disimulase revelándose con apariencias variadas y diversas.

Para ambos pensadores el conocimiento empírico humano, es erróneo y este error ontológico es parte de la misma estructura del pensamiento. La razón o explicación de este error según Heidegger, sería el misterio por el que él Ser se manifiesta en los múltiples objetos o formas de lo existente. Y Sankara dirá, como toda la Vedanta Advaita, que la causa de este error es "maya", es decir, la ilusión.

Según ambos sabios, el ser humano sufre el apego a los distintos objetos de la existencia que no son sino "ilusorios". Y el resultado inmediato como también dice Buda, es el sufrimiento, el desengaño, la desilusión, cuando estos objetos desaparecen por la naturaleza transitoria de los mismos.

Las polaridades o formas duales son ilusorias como la mente donde se producen. Lo ilusorio no es absolutamente irreal sino relativamente, en el sentido de que existen pero tan solo con existencia mental y transitoria. Lo auténticamente real ha de ser siempre idéntico a sí mismo. Las formas, en cambio, son cambiantes por su propia naturaleza.

La sabiduría auténtica es o consiste en descubrir la Verdad oculta en las apariencias de la existencia. Pero esta Verdad no puede ser comprendida por la mente, ni el intelecto racional sino por la intuición profunda, fruto de una silenciosa contemplación, donde los contenidos mentales no tienen cabida alguna.

Según la filosofía Vedanta Advaita, la sabiduría tan solo se revela en un estado de conciencia de unidad con él Ser, se comprende por la intuición y discernimiento interno y se vive por contemplación, jamás por una mera especulación intelectual.

Entre todos los Upanisads, que son tratados de Sabiduría milenaria, el que aborda de un modo directo el tema que nos ocupa es el ISHA UPANISAD. En él se expresa con toda claridad la disolución de los opuestos en la unidad. "Isha" es raíz de Ishavara que significa lo divino manifestado.

La existencia humana, se desarrolla siempre entre los opuestos o las polaridades, creando la consiguiente tensión, pero también la lógica creatividad del intelecto. El placer y el dolor, la verdad y la mentira, el amor y el odio, el ser y el no ser, la luz y la oscuridad, son las más fundamentales polaridades en que discurre la existencia humana, con sus consiguientes variaciones y manifestaciones. Entre ambas polaridades u opuestos, no hay camino posible de unión, tan solo existe la destrucción o eliminación de dichos opuestos.

Mientras el ser humano se siente autónomo y separado, buscará siempre el opuesto que más le agrade y le satisfaga. La lucha y tensión de los opuestos, tan solo desaparece en la visión y comprensión de la Unidad Real frente a la ilusoriedad de la existencia de los opuestos.

En el versículo 15 de Isha Upanisad se dice: "Por una máscara dorada está oculta la cara de la Verdad, descúbrela tú, ¡oh luminoso sol! para que pueda verla yo, que la amo."

La Verdad se esconde siempre tras la máscara de las apariencias, que es dorada e ilusoria. La infinitud de La Vida está cubierta o disfrazada por las formas finitas.

Es evidente que todo esto que decimos no es fruto ni puede ser adquirido por el intelecto o la razón, sino por la intuición. A esa intuición tan sólo se accede por el silencio mental.

La visión dual de los opuestos y las polaridades, es patrimonio del conocimiento sensorial y mental, que es en el que hemos sido educados desde nuestra infancia.

Si nos consideramos adultos y conscientes de la infinitud de nuestra conciencia profunda, deberemos penetrar y practicar ese conocimiento Intuitivo propio de los seres humanos despiertos a La Verdad de sí mismos.

En el versículo 7 de Isha Upanisad se dice: "¿Qué ilusión o qué sufrimiento puede haber en aquel ser humano para quien todos los seres son el Ser porque ve la Unidad?", y en el versículo 6 se dice: "Aquel que ve todos los seres en el Ser y al Ser en todos los seres, comprende y no rechaza nada", versículo que nos lleva directamente a pensar en la esencia de la tolerancia.

En los últimos versículos, se nos dice que con la disolución de lo manifestado, se traspasa la muerte y por lo Inmanifestado se vive la inmortalidad.

Esta es la gran enseñanza de la sabiduría milenaria de los Upanisads: La unidad nos libera de toda ilusión y sufrimiento, inclusive de las polaridades que nos hemos auto impuesto.

CONCLUSIÓN

Este trabajo que me fue encomendado, fue fácil de realizar, en el sentido que lo tomé con la alegría de saber que aprendería muchas cosas, y en este ir y venir de tantas lecturas, intenté abarcar un enfoque distinto, un poco mas orientado a la filosofía oriental si se quiere, tratando de resumir para ustedes QQ:.HH:. una cultura diferente, que a medida que uno estudia, logra leer entre líneas muchos pensamientos que a veces se creían occidentales.

Lo anterior no quiere decir que no invertí una gran cantidad de tiempo en su realización, pero la satisfacción del conocimiento que pude asimilar hizo de ésta, una grata tarea, y cuando uno trabaja con amor y agrado, no existe piedra suficientemente grande que no nos permita hincarle el cincel, aunque sea en parte.

En síntesis y pocas palabras podría decir que, si bien es cierto vemos, o creemos ver opuestos en todas partes, estos no son mas que una herramienta que utiliza nuestro intelecto para intentar comprender el Ser, lo cual no podríamos si no es a través de la manifestación del mismo, lo cual tengo entendido se dará más adelante, si es que alguna vez puedo abrir mis siete chakras, y en alineación perfecta, "conectarme".

Otro aspecto muy interesante de estudiar, es aquel que dice relación con esta verdadera UNIDAD del TODO, y que nos dice claramente que dentro de cada uno de nosotros, convive armónicamente el binario, que caminamos por él en cada momento, "que transitamos en la sintonía del ying-yang", como conversábamos hace un tiempo con un Q:.H:.

Por último, sólo quiero recordarles que piensen en el acertijo con que comencé esta plancha, es de una simpleza y belleza que solo se entiende cuando uno mismo encuentra la solución, y que nos entrega una forma muy especial de entender la realidad.

Autor/Fuente: Anónimo/Masones en Lengua Española