Hoy cuando abrí FB, me recordó que es el día internacional de la niña y más allá del por qué hay un día para todo, automáticamente me llevo a pensar en mi hija, en las niñas y sus desafíos en nuestra sociedad, ¿cómo las apoyamos?, ¿cuándo aceptamos que se enfrenten a sus desafíos?, ¿las educamos como princesas?, ¿las educamos para que sean mujeres exitosas en el ámbito laboral?, ¿Para que tengan un matrimonio para toda la vida?, ¿para que sean más sociables?, ¿a defenderse?... Cada vez que leo y me encuentro con un artículo de maternidad, me impresiona la cantidad de cosas correctas de cómo debemos educar a nuestras hijas, las niñas del futuro.Hay movimientos variados que difunden cuáles y cuándo entregar las herramientas adecuadas, para el correcto desarrollo de nuestras hijas y por supuesto, que les permitan desenvolverse cuando grandes. Debo reconocer que la cantidad de lo que deberían ser y cómo deberíamos educarlas, me ha tenido y tiene a muchas pacientes con una angustia y culpa increíble, porque nos han enseñado como sociedad a educar desde el debería, no desde lo que sienten, sentimos...porque claro: hoy son otros tiempos, no pueden vivir en una burbuja, el mundo es más violento, más competitivo, en fin. Como dice Mafalda: ¡Paren el mundo que me quiero bajar!.En este día me parece necesario que nos miremos como madres, mujeres, las miremos y veamos toda la bondad que hay en ellas, toda virtud, toda la perfección que existe en cada una de ellas, en cómo se desarrollan y en sus inteligencias. Por favor para esto último, seamos benevolentes, compasivas (sé que a veces cuesta ..pero hoy dejemos el deben ser) y amemos esa inteligencia que esta en ella y no en la otra, o en el otro.Podrán ser o son; artistas, modelos, ingenieras, vendedoras, asistentes, presidentas, líderes, doctoras, etc...pero hoy dejémoslas ser. Toma tus miedos, toma tus culpas y perdónate ¡sí, perdónate!. Por muchas veces hacer una proyección tuya su realidad, por intentar encasillarla desde tan pequeña en lo que debería ser, por compararla con otros u otras, porque tal como les digo a mis queridas madres pacientes, el deficit atencional, la hiperactividad, la timidez, la ansiedad, entre otras, son emociones que están ahí, tratando de destacar y canalizan o mejor dicho las encasillamos en "algo para atender" y no como algo que al mismo tiempo denota un gran potencial y que sin duda, aprendiendo a convivir con ellas, se pueden transformar en la mejor de las virtudes.¡Este mundo necesita diversidad no comodidad!, con lo anterior no es mi intención atacar a colegios ni a nadie, solo es un alto para que reflexionemos, que todas sin importar "nuestro diagnostico" tenemos algo hermoso y único que entregar a este mundo, así, tal como lo hace la madre naturaleza, la cual muchas veces nos sorprende y nos demoremos siglos en entender lo que quiere decir, pero estarán de acuerdo que es perfecta, con toda su diversidad.Así es cómo hoy agradezco en el corazón conocer tantas niñas, madres, tener una hija, una sobrina, que me permite recordarme que no existe lo bueno y lo malo inmediato en ellas, que en todas las emociones que presentan hay algo superior que viene a contribuir a este mundo y somos los adultos responsables en permitir, que dejen su sello, no el que la sociedad nos dicta, o que pensamos mejor según nuestras creencias (sean limitantes o no).Dejémoslas ser, guiémoslas, pero no cambiemos su misión, nuestras expectativas nos son las suyas, ¿cómo sabes si te sorprende y aquella característica contra lo que tanto luchaste con tu hija, es su virtud en la adultez? A veces como muchas cosas en las vida, cuando hablamos en un marco de respeto, compasión y benevolencia, fluir es sin duda, la mejor herramienta que debemos entregar, para que disfruten y amen la vida.Un dulce abrazo para todas las mamás, que a veces dudan de lo que hacen, que se equivocan, que lo intentan, que las cuidan y que de una u otra manera, despejan el camino para sus niñas, con el corazón e intuición.Marce. PD: Con amor para mi pequeña niña, mi gran compañera de viajes, de yoga, de siestas, compras, que ama bailar, disfruta el ballet, su familia, amigas, los monitos (dibujos animados), la naturaleza, en fin, la vida. Te amo Manina.