Se ha demostrado que el sentido del tacto se desarrolla en embriones de menos de 8 semanas de edad, dentro del útero materno, el bebé se balancea y flota, y el suave contacto con el vientre materno se va haciendo cada vez más intenso hasta que llega el momento del parto. Así pues podemos afirmar que el sentido del tacto es uno de los primeros sentidos que se desarrolla, y el último que perdemos antes de morir.
Esto es tan evidente que después del parto los bebés siguen necesitando esta estimulación táctil. En un estudio se pidio a unas mamás que durante un tiempo porteasen a sus bebés, no sólo en el momento de comida o cuando llorasen, si no que lo tuviesen cerquita y lo cogiesen en brazos durante más tiempo. Al tiempo se comparó a estos niños con otros a los que se les no se les cogía en brazos tanto tiempo.
Los resultados fueron muy curiosos, aquellos que permanecian mas tiempo en contacto con sus mamás lloraban a lo largo del dia hasta un 50% menos que los otros, lo cual evidenciaba la importancia del tacto y contacto en los primeros meses de vida del bebé.
En esta línea cabe mencionar el "Método canguro" como uno de los más utilizados en la mayoria de los hospitales materno-infantiles por los beneficios sobre la salud a nivel fisiológico, socioemocional y psicológica de los bebés, y del mismo modo se recomienda la práctica habitual de masaje, como parte de sus cuidados.
Hasta otra!!