“El murmullo de las abejas”, de Sofía Sevilla

Por Guillermo Guillermo Lorén González @GuillermoLorn

«Esta es una novela inspirada en la historia real de un pueblo de la zona citrícola del norte de México»

«El murmullo de las abejas huele a lavanda, a ropa hervida con jabón blanco, a naranjas y miel: una historia impredecible de amor y de entrega por una familia, por la vida, por la tierra y por un hermano al que ha esperado siempre, pero también la de una traición que puede acabarlo todo».

Cubierta de: El murmullo de las abejas

El murmullo de las abejas cuenta la historia de una familia de terratenientes, los Morales Cortés, que posee una hacienda bautizada como La Amistad en el municipio de Linares (Nuevo León) y que permite que los campesinos usufructúen sus tierras a cambio de un porcentaje de la producción. Pero en 1910, la nana que ha criado a toda la familia, y que actualmente es una anciana que se pasa las horas en una mecedora, siente una extraña llamada de la Naturaleza y echa a andar hacia el monte, encontrándose dos bultos bajo un puente: en uno hay un bebé con una extraña malformación en la boca, y en el otro un panal de abejas cuyos miembros, extrañamente, no han picado al neonato.
Ese niño, al que la familia acoge y bautiza como Simonopio, no sólo se convertirá en un miembro más de los Morales Cortés y despertará la sensibilidad de sus integrantes –en especial la del narrador, un anciano que cuenta esta historia al taxista que le lleva a Linares-, sino que también será la salvación de esa estirpe. Porque Simonopio tiene una extraña capacidad para percibir el futuro o, mejor dicho, para comunicarse con la Naturaleza, la cual le permite anticipar los problemas que se avecinan. Así, será Simonopio quien perciba la llegada de una epidemia (la influenza española), y  también usará sus habilidades para comunicarse con las abejas para dejar que sean ellas las que le indiquen la forma de sacar a su familia de la crisis económica que se avecina por culpa de las Reformas Agrarias emprendidas por el gobierno.

Pero hay algo más importante que la sinopsis del libro, y es la conversación que pude mantener con la autora y que ahora os contaré.

Como surgió la idea de este libro
La idea surgió muchos años antes de que me sentara a escribirlo, con las anécdotas de mi abuelo, muy simpáticas, y con un humor ácido a veces -muy mexicano-. Con más edad lo que pude ser capaz de ver era toda la nostalgia de la cual nunca habló. Entre una anécdota y otra que no tenían ninguna conexión entre ellas, pues simplemente eran momentos, y entre estos momentos había grandes momentos de silencio.
Si las anécdotas fueron el gran impulso, el gran descubrimiento fue encontrar que había en esos silencios. La digestión de esto se hace a través del narrador Francisco que se lo cuenta a un taxista.
Mi abuelo murió cuando yo tenía nueve años pero como me gustaría que viviera y preguntarlo lo que no fui capaz de preguntarle de niña. Y ahora que veo la vejez como un momento en el que llegas a tener un poco más de silencio, me gustaría creer que llegas también a entender un poco más las cosas.

Que tanto de realidad hay en la novela.
Todo lo histórico de la novela es real. Que la influenza española paso por ahí, la revolución,… De las anécdotas de mi abuelo si lo robé algunas. Lo de Simonopio viene de una; otra anécdota es el fusilamiento del papá de Beatriz.
Lo que también es real es el espíritu de esta gente, la incertidumbre, el dolor por dejar atrás todo lo que iban dejando y por perder todo lo que iban perdiendo. También es muy real el espíritu de Anselmo Espiricueta, pues en palabras del narrador, Anselmo es un hombre de rencores insalvables.

Con Sofía Segovia

Cuanto tiempo te llevó escribirla.
Tres años. Escribirla fue un acto muy privado y muy lindo, pero luego llevarla a la publicación…

El nombre de Simonopio ¿de donde sale?
De mi abuelo, era muy creativo y tenía un gran sentido del humor y ahora creemos que en su hacienda estaba este niño que se debe de haber llamado Simón, pero con ese sentido del humor tan sabroso que tenía le apodó Simonopio, al que en una ocasión lo cura con un sinapismo, y esta anécdota la quise traer a la novela con un sinapismo para Simonopio.

Cual es el principal actor de tu novela.
Simonopio se convierte en el personaje principal de la novela cuando yo no lo esperaba por sus peculiaridades. En principio iba a ser Francisco Rico, que también es personaje central e importante, aunque tengo que decir que cada personaje tiene su momento muy importante, como ocurre en la vida.
Beatriz, Francisco padre, la nana Reja…, todos tienen su momento, hasta Espiricueta.

Como se te ocurrió el protagonismo de las abejas.
Las abejas nacieron casi al mismo tiempo que Simonopio, y como dije antes, Simonopio no iba a ser el personaje principal, sino el compañero, y necesitaba a alguien que le ayudara a sobrevivir en ese momento de abandono hasta que lo encontrara la nana Reja; y me di cuenta que las abejas, que son símbolo de vida eran las propicias para mantenerlo con vida hasta evitar que se desangrara por el cordón umbilical sin anudar. Me di cuenta que a través de ellas podía embellecer el dato histórico.

Has encontrado tu propia voz.
Creo que la he encontrado, y ser fiel a la historia que tengo que contar. Cada historia nos llama a escribir cosas nuevas. Me siento a escribir y lo único que que quiero que brille es la historia, no quiero estorbarla.
He encontrado mi voz, y me he alejado de mis miedos. Estoy satisfecha con mi primera novela Noche de huracán, que fue publicada en 2010, que ahora está agotada pero la van a publicar muy pronto. Estoy muy satisfecha con la segunda novela El murmullo de las abejas; y la tercera va muy bien, está en proceso.

No quiero terminar esta reseña sin una frase del libro en la que Francisco Morales (narrador) le dice al taxista:
“…pero cuéntale esta historia a mis hijos. La saben solo a pedazos. Ya es hora de que la conozcan completa. Diles que les quise tanto, que por ellos valió la pena los años que pasé sin ver a mi hermano. Diles que caminen por la sombra. Que escuchen con los ojos, que vean por la piel y que sientan con los oídos, porque la vida nos habla a todos y sólo debemos saber y querer escucharla, verla, sentirla”.  [Pág. 523]

Me quieres decir algo más, Sofía.
El murmullo de las abejas es una novela escrita desde el cariño, con cariño y con pasión.

Sofía Segovia

La autora:
Sofia Segovia (Monterrey, Nuevo León, 1965) se licenció en Ciencias de la Información y Comunicación en la Universidad de Monterrey con el convencimiento de que se convertiría en periodista., pero el destino le llevó a trabajar como asesora de imagen y comunicación en varias campañas políticas de Nuevo León. Asimismo, fue ‘negro literario’ para varios políticos, a quienes ademásescribía sus discursos.
Posteriormente trabajó como guionista para teatro, siendo especialmente reseñable su labor como guionista de comedias y de comedias musicales para teatros amateurs, donde también participó como actriz y cantante. También ha participado como ponente en diversos clubes literarios y en escuelas, y actualmente imparte talleres de creación en la Fábrica Literaria de Felipe Montes.
En 2010 publicó su primera novela, Noche de huracán (Consejo para la Cultura y las Artes de Nuevo León). Pero ha sido El murmullo de las abejas, su segunda novela, la que le ha proporcionado el aplauso de la crítica y del público mexicano a los pocos meses de su publicación. Actualmente escribe su tercera novela.

El libro:
El murmullo de las abejas ha sido publicado por el sello Lumen en su Colección Lumen Contemporanea. Encuadernado en tapa dura con sobrecubierta, tiene 526 páginas.

 Cómpralo a través de este enlace con Casa del Libro.

Como complemento pongo el booktrailer del libro publicado por la editorial mexicana, Lumen México, por lo que la cubierta del libro es distinta.

Para saber más:

http://www.sofiasegovia.com/   (Web oficial de la autora)

Sofía Segovía y El murmullo de las abejas