Felipe juan Froilán, que ya apuntaba maneras de pequeño pegándo y chinchando a sus primos, parece ser un pre-adolescente de lo más revoltoso.
Estando al cuidado de su padre durante las vacaciones de Semana Santa, se disparó una pistola de perdigones en el pie, en la finca familiar de Soria.
Este hecho ha tenido una enorme repercusión mediatica. Por su parte, el padre, divorciado de la Infanta Elena podría enfrentarse a una multa por dejar un arma de fuego a un menor de 14 años.
Parece ser que el Rey de España no gana para sustos con sus yernos, entre Urdangarín y Marichalar.