SINOPSIS Un hombre vuelve a la zona donde vivió hace cuarenta años para asistir a un funeral. En un arranque incomprensible e inesperado, decide acercarse a la casa de su amiga de la infancia, Lettie. Y es ahí donde los recuerdos que no sabía que tenía empiezan a fluir, como el océano que Lettie insistía que era, en realidad, su estanque. La memoria se mezcla con la fantasía mientras el protagonista nos cuenta un viaje imposible, en un mundo que puede o no existir, repleto de monstruos imaginarios que se hacen reales en el relato de ese niño de siete años. Tan reales como los monstruos que los adultos si podemos entender y temer, y ante los que la única defensa con la que cuenta el niño son las tres extravagantes mujeres que viven al final del camino.
Deja que te cuente.
Este es el segundo libro de Gaiman que cae en mis manos, y ambos (Stardust y este) han hecho que empiece a pensar que un pedacito de El flautista de Hamelín cayó en los genes de Neil.Tanto Stardust como El océano al final del camino comparten una característica (para mi gusto) maravillosa: son cuentos para adultos. Aunque este hecho sin duda me fascina, está claro que no es exactamento lo que me ha robado el corazón.
¡Grita conmigo inmensidad!
Son tres los elementos que vuelven brllante a esta novela corta:- La atmósfera: si he de buscar una palabra que la defina, me quedo con magistral. El autor teje una fina red que permite al lector zambullirse en la luz y en la oscuridad a placer mediante coloridas escenas de gran contraste e, incluso, de cierta ambigüedad (en algunos momentos comparte estética con Miyazaki).
- Los personajes: vivos (mánida expresión de la que a veces goza la literatura). Sienten, exploran, eligen pasionalmente e, incluso, se equivocan. Los giros inesperados en su línea vital a través de la obra, así como sus arriesgadas decisiones me atrapan y me piden a gritos saber más de ellos.
- Las preguntas sin respuesta: reconozco que sufrí (un poco) al pasar la última hoja del relato y descubrir que nada más me quedaba por leer, pero está es la esencia de la trama de esta novela: conocer en su momento, en su justa medida y sin posibilidad de réplica.
Precioso.
¿Habéis leído previamente algo de Neil Gaiman? ¿Qué os parece esta novela?