El Olivo: la historia de un árbol que daba vida a un hombre y por el que una nieta hace lo imposible.
Alma tiene 20 años y trabaja en una granja de pollos en un pueblo del interior de Castellón. Su abuelo, que para extraña sorpresa de su familia dejó de hablar hace años, es la persona que más le importa en este mundo. Ahora que ha decidido dejar de comer también, Alma se obsesiona con que lo único que puede hacer "volver" a su abuelo a su estado natural es recuperar el olivo milenario que la familia vendió contra su voluntad hace 12 años.
Sin decir la verdad, sin un plan, y sin apenas dinero, Alma embarca a su tío "Alcachofa", de 45 años, arruinado por la crisis, a su compañero de trabajo Rafa, de 30, a sus amigas Wiki y Adelle y a todo su pueblo, en una empresa imposible: recuperar el monumental olivo, replantado en algún lugar de Europa, y traerlo de vuelta a la masía familiar.
Tras asistir al preestreno de El Olivo, el pasado viernes 29 de Abril, tengo que decir que se trata de una película con un mensaje que a muchos puede parecerle extraño, pero que realmente existe, el vínculo vital entre algún objeto y un ser humano. Es una cinta repleta de sentimientos y de emociones. Es una crítica clara contra los sucesos vividos en España durante esos años de la burbuja inmobiliaria donde tantos ciudadanos perdieron toda su vida.
Con el tema de los actores, tras haber mencionado a Manuel Cucala anteriormente, ahora me toca destacar a Anna Castillo quien te hace sentir dos emociones contrapuestas, es decir, o la amas o la odias, todo es por su papel en toda la película, ya que te puede hacer dividirte en ocasiones, pero a mí me enamoró durante toda la película y sobretodo en esas escenas conjuntas con Manuel Cucala me arrancó un trozo de mí. Por otro lado destacar a Pep Ambròs un actor con una corta trayectoria que claramente marca el nexo de unión entre el trío protagonista.
Posiblemente el ritmo de la película sea un poco lento, pero eso la directora lo sopesa con una fotografía brillante y sobretodo logrando un montaje final que te hace permanecer pegado a la butaca del cine. Este ritmo pausado que nos utiliza hace profundizar con los sentimientos de los personajes y es por eso por lo que creo que es el ritmo perfecto para narrar esta historia.
Sólo me queda decir que el final de El Olivo es bastante predecible y por lo tanto todo el sentimiento soportado durante su metraje no llega a eclosionar con lágrimas, pero admito que un final completamente diferente me hubiera sacado esa lágrima que asomaba pero que al final no salió debido a que vimos el final que estabamos esperando todos. Se trata de una cinta que claramente va a formar parte de esas videotecas que buscan un cine con el que disfrutar y sentir. Es por todo esto por lo que mi puntuación es de 5 fotogramas