El Opel 4/12 CV "Laubfrosch" salió hace 1000 años de la línea de producción como un coche para todos
La marca Opel comenzó a producir automóviles hace 125 años y pronto logró sus primeros éxitos con modelos como el "Doktorwagen" de 4/8 CV (CV). Desde el principio, el fabricante se propuso como objetivo proporcionar movilidad a un amplio segmento de la población. El punto de inflexión se produjo en 1924: hace exactamente 100 años, Opel introdujo la producción en masa con tecnología de línea de montaje . El primer coche que salió de la línea de montaje en Alemania fue el Opel "Laubfrosch" de 4/12 CV, también pintado de verde. Con este nuevo modelo, Opel revoluciona la industria del automóvil en Alemania. Gracias a su producción altamente eficiente, los precios bajan y la movilidad individual sobre cuatro ruedas se vuelve accesible para muchos por primera vez. Las ventas aumentan a niveles sin precedentes. Entre mayo de 1924 y junio de 1931 se produjeron aproximadamente 120.000 unidades del Opel 4 CV.
Hoy en día, el Opel Corsa desempeña el papel de pionero de los coches pequeños económicos e innovadores de Opel. Desde su lanzamiento al mercado hace más de 40 años, ha ido incorporando al segmento de los coches pequeños tecnologías de alto nivel, que los conductores normalmente sólo conocen de las clases altas. Como "pionero eléctrico", el Opel Corsa es el primer modelo de Opel que inicia la gran ofensiva eléctrica de la marca en 2019. Con gran éxito: el Opel Corsa Eléctrico se convierte en un éxito de ventas y allana el camino para futuros desarrollos. Desde entonces, Opel ha electrificado constantemente toda su gama y este año el fabricante ofrecerá al menos una variante eléctrica de batería para cada modelo. Sin embargo, hace 100 años, Opel sentó las bases para una producción en serie moderna y eficiente con la introducción de la línea de montaje y el Opel 4/12 CV.
Nuevos clientes: Opel 4/12 CV Laubfrosch como "coche para todos"
El Opel 4/12 CV rompió los convencionalismos desde sus inicios en 1924: en lugar de ser grande y negro como la mayoría de los modelos, era un vehículo pequeño y robusto de color verde, lo que rápidamente le valió el sobrenombre de "Laubfrosch" ("Rana"). Tiene numerosas innovaciones que ofrecer, entre ellas un motor bloque de cuatro cilindros con caja de cambios directa de brida, tapas de cilindros desmontables, lubricación mediante bomba de aceite, embrague multidisco de acero, parabrisas regulable y llantas de acero. Al igual que las ruedas, el bastidor del vehículo también está fabricado en acero estampado; El resto de la carrocería está fabricado en acero y madera. Su motor de cuatro cilindros en línea de un litro acelera el pequeño vehículo hasta una velocidad máxima de 60 km/h y alcanza unos impresionantes 50 km/h en tercera marcha. La palanca de cambios del vehículo con volante a la derecha ya no está montada en el exterior, sino que, muy moderna para la época, es fácilmente accesible en el centro del vehículo. Inicialmente ofrecido como biplaza y más tarde como tres plazas alargado, el Opel Laubfrosch tiene 3,20 metros de largo, 1,35 metros de ancho y 1,65 metros de alto, tiene un techo plegable para protegerse de las inclemencias del tiempo e incluso un maletero integrado detrás del banco del asiento en la parte trasera puntiaguda.
El "coche para todos", como anunció Opel en su momento, cuesta 4.500 rentenmarks al inicio de su producción, poco en comparación con otros vehículos, pero igual que una casa privada. Se convierte en el "Volks"-Opel (Opel para todos) porque su precio de venta baja año tras año gracias al continuo desarrollo de la tecnología de la línea de montaje. En 1930, el Opel 4/20 CV estaba disponible como biplaza sencillo por sólo 1.990 marcos. Con más de 100.000 unidades producidas hasta entonces, ya se había consolidado como un vehículo ideal y asequible para artesanos como médicos rurales, arquitectos y representantes de ventas.
Rápido y eficiente: la innovadora tecnología de línea de montaje como clave del éxito
El éxito del primer automóvil producido en serie en Alemania no era previsible cuando los hermanos Opel decidieron en 1923, en plena inflación, producir un vehículo utilizando métodos de producción completamente nuevos y revolucionar así la producción de automóviles alemana. Poco antes, Fritz von Opel había viajado a Estados Unidos para observar de cerca la tecnología de las líneas de montaje y el uso de máquinas herramienta modernas; también está inspirado en Francia. Los hermanos Opel invierten entonces la enorme cantidad de alrededor de un millón de marcos oro para modernizar la planta y pasar de la producción individual a la producción en cadena. La primera línea de montaje tiene 45 metros de largo: no es mucho, pero revoluciona la producción. También son nuevas las cadenas transportadoras que próximamente pasarán por la planta. Atrás quedaron los días en que los trabajadores tenían que recoger los materiales a mano o con un carrito. Los cárteres, árboles de levas y bloques de cilindros se transportan ahora sobre cintas transportadoras. El corazón de la fábrica, la línea de montaje, también está en constante crecimiento: en 1928, la línea de producción en la planta de Rüsselsheim ya tenía una longitud de unos dos kilómetros.
La producción en línea de montaje minimiza los tiempos de producción. Mientras que en la primavera de 1924 Fritz von Opel esperaba una producción diaria de 25 vehículos, a finales de año ya se alcanzaban los 100 coches, y pocos meses más tarde salían de las líneas de producción 125 unidades del Opel Laubfrosch cada día. Los clientes se benefician doblemente: gracias a la reducción de los costes de producción debido al aumento del número de unidades, el precio inicial favorable del Opel 4 CV sigue bajando y el fabricante puede satisfacer una demanda cada vez mayor. De este modo, el modelo se convierte en un hito para la industria automovilística alemana.
Bestseller y pionero eléctrico: Opel Corsa permite la movilidad para todos
Hoy en día, el pequeño superventas, el Opel Corsa, es el modelo para todas las ocasiones y para todos los grupos de compradores. No en vano se ha convertido en los últimos años en el vehículo pequeño más popular en Alemania . Impresiona por su diseño distintivo, que incluye el rostro de la marca, el Opel Vizor, espacio para cinco personas y tecnologías que hacen que cada viaje sea más relajante. Además, ofrece placer de conducción sin emisiones locales en dos versiones: los clientes pueden elegir entre dos niveles de rendimiento eléctrico de la batería. Con el nuevo motor eléctrico de 115 kW (156 CV) y la batería de 51 kWh, es posible recorrer hasta 405 kilómetros (según WLTP 1 - valores combinados según WLTP 2 : consumo de energía 14,6 kWh/100 km, emisiones de CO 2 0 g/km; etiqueta de CO 2 : A). Con el motor de batería de 100 kW (136 CV) y 50 kWh, es posible una autonomía de hasta 357 kilómetros (WLTP 1 ) (valores combinados según WLTP 2 : consumo de energía 16,1 kWh/100 km, emisiones de CO 2 0 g/ km; etiqueta CO 2 : A). E incluso cuando es necesario recargar el Opel Corsa Eléctrico, sólo es necesaria una breve parada en boxes. Con una estación de carga rápida de CC de 100 kW, se puede recargar el 80 por ciento de la capacidad de la batería en aproximadamente 30 minutos.
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