De esta manera, la onza de oro al contado prosiguió con la tendencia alcista registrada en las pasadas jornadas y subió un 2,3% en el parqué londinense, hasta los 1.421 dólares, frente a los 1.388,5 dólares del cierre de ayer.
Una vez más, los inversores apostaron por el metal precioso como refugio por la posible inflación que podría derivarse de los planes de la Fed de inyectar nuevo dinero con la compra de deuda y que significa una depreciación del dólar.
El plan de estímulo anunciado el pasado miércoles por la Reserva Federal, que pretende impulsar la recuperación económica del país, permitirá inyectar 600.000 millones de dólares en el sistema para abaratar los préstamos.
La iniciativa consistirá en la compra de bonos del Tesoro desde ahora hasta junio del 2011, a razón de unos 75.000 millones de dólares por mes.
Además de este factor, otro elemento que tiene en vilo a los mercados es la situación económica que atraviesa la República de Irlanda, en su intento por recortar su déficit presupuestario.
El Gobierno irlandés está teniendo dificultades para convencer a los mercados de deuda de que no necesita ayuda financiera de la Unión Europa o del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Dublín presentará en diciembre su nuevo presupuesto, mientras trata de combatir el déficit, aunque existe una creciente preocupación a que éste no sea aprobado por el Parlamento irlandés.
En medio de este panorama económico, el precio del oro ha continuado con su trayectoria al alza y en lo que va de año, la cotización de la onza al contado ha subido un 29%.
Según indicó el analista Ong Yi Ling a la BBC, "con esta racha de récords, el mercado del oro está nadando en aguas desconocidas",
"Las compras de activos de Estados Unidos y los problemas de deuda en la eurozona constituyen un marco convincente para que el precio del oro continúe al alza en el largo plazo", de acuerdo con este experto.
(fuente:efe)