¿El Oscar? No, gracias

Publicado el 22 marzo 2010 por Leevancleef

“Mi marido es un tipo que trabaja 12 horas al día, un trabajo manual. Tengo que sacarle de la cama y decirle ¿puedes probarte este traje de Dolce?. Y él es en plan: ¿Tengo que hacerlo?…Es estupendo”. Así explicaba una encantada Sandra Bullock a Oprah Winfrey su relación con su marido Jesse James inmediatamente después de ganar el Oscar. Lo que no sabía en ese momento es que hubo un tiempo en el que Jesse salía encantado de la cama para meterse en la de otra , la  de la “discretísima” en todos los aspectos Michelle Bombshell, la mujer que  se ha cargado el matrimonio de la actriz dos semanas después de vivir el mejor día de su vida.

Michelle se ha ido de la lengua en el momento más oportuno, oye. Bueno,podía haber sido más sibilina todavía y contarlo una semana antes de la ceremonia , apuesto que Jesse James hubiese tenido “lágrimas en los ojos” ( como comentó tras el triunfo de su mujer) pero por otros motivos y desde luego sentado en la butaca de su casa y no en la del pabellón del teatro Kodak. Este señor puede sentirse orgulloso, no solo de haberle puesto los cuernos a su mujer mientras está rodaba en otra ciudad y de hacer como “que se estaban dando un tiempo”, sino porque la tal Bombshell esta es todo un dechado de hermosas virtudes, entre ellas la de su  debilidad por  juguetear con simbología nazi ( es que aparte de todo ,que pasado de moda está esto ya hija, que no escandalizas a nadie) y el de tener chapitas en la nevera de su casa que leen “White Power”, algo que ha comentando su marido en las vistas por la custodia de su hijo. Más familias del año para la colección, como podeis ver.

Foto de la página TMZ.COM

¿Como ha podido pasarle esto a la buena de Bullock? Es una putada que ahora cada vez que vea su Oscar se acuerde de su marido agachando las orejas y admitiendo el dolor más allá de cualquier explicación que ha causado a su mujer y sus hijos -frase literal ( Jesse tiene dos hijos de su primer matrimonio y una niña del segundo con una ex actriz porno, por cuya custodia estaban luchando el y Sandra recientemente). Jesse no admite expresamente una infidelidad pero vamos , que da a entender que el es el culpable de todo lo que está pasando y que se para colmo, no es como si se hubiese enrollado con Doris Day. Porque con menudo angelito que fue a parar.Avergonzado debe estarlo un rato.

La lectura más interesante que se saca de toda esta historia, sin embargo, tiene poco que ver con Jesse James y su amante con fetichismo por gorras de las S.S. Lo más paradójico de todo esto es que, una vez más, por un motivo o por otro, últimamente a las actrices ganadoras del Oscar no les acaba ir del todo bien. Tenemos el caso de Hilary Swank, que pasó de promesa de los 80 semi olvidada a ganar dos Oscars en cuatro años por sus papeles protagonistas en “Boys Don’t Cry” y ” Million Dollar Baby”. Bien, ¿alguién ha visto algo decente o de mínimo éxito que haya protagonizado Hillary en los últimos… hmmm… 5 años? ( P.S I Love You no cuenta!). Además, justo después de ganar el segundo premio se separaba de su marido Chad Lowe ( el hermano menos agraciado de Rob) .

Con Reese Witherspoon pasó algo parecido . Su June Carter de” En la cuerda floja” le dió el reconocimiento que jamás habríamos apostado que conseguiría ( Joaquin Phoenix si que está soberbio en la peli pero tuvo la mala suerte de competir con el Capote de Philip Seymour Hoffman) pero desde entonces poco hemos sabido de ella, aparte de su relación ya rota con Jake Gyllenhaal, lo que lleva a comentar que Reese también se separó meses después de ganar la estatuilla de su marido y padre de sus dos hijos el ( mediocrillo) actor Ryan Phillippe.

Y para terminar ni nombrar lo que ha ocurrido con la carrera de Halle Berry. Si Catwoman es la recompensa a haber ganado un Oscar, válgame Dios.  Bueno así como Sandy, Halle tiene también el Razzie. Pero bueno, ¿quién quiere una carrera  como la de Bette Davis si te has encontrado esto por el camino?: