El otro 20%

Por Chiaragiorgetti
Durante la semana dedicada al cáncer de mama se publican muchas cosas. Por ejemplo, algunos vídeos muy interesantes con el testimonio de mujeres que se han enfrentado a ello. Una iniciativa que sin duda ayuda a muchas mujeres que están pasando por lo mismo, porque el ver reflejadas las propias emociones y preocupaciones en otros y descubrir cómo han sabido gestionarlas, siempre da mucha luz. 
Sin embargo ya el año pasado me llamó la atención el silencio que durante esta semana se genera en torno al cáncer de mama metástasico. Ni un artículo de periódico. Ni una entrevista. Ni un vídeo con el testimonio de alguna mujer que explique su experiencia.Me pregunté por qué si en España hay alrededor de unas 25.000 mujeres con cáncer de mama metastásico, durante esta semana casi no se las nombra.
¿Acaso las que tenemos un cáncer de mama metastásico no necesitamos conocer cómo otras se enfrentan a este diagnóstico y viven el día a día de su enfermedad (que poco tiene que ver con el día a día de la enfermedad diagnosticada en otros estadios)? ¿Nadie ha pensado que, cuando tienes metástasis, cuesta mucho identificarse con lo que va saliendo en estos días?   
Yo entiendo que la palabra "metástasis" asusta y que tampoco es cuestión de sembrar el pánico. Lo que digo es que el cáncer de mama metástasico es una realidad que, aunque afecte solo al 20% de las mujeres con cáncer de mama, también existe.
En estos dos años he conocido a mujeres con cáncer de mama metastásico que han sido y son pilares de fortaleza y entereza. ¿Por qué en esta semana no podemos contar también con su testimonio? Quizá ayudaría a mucha gente. Como mínimo a unas 25.000 mujeres. Porque si cuando te diagnostican un cáncer se te cae el mundo encima, cuando te diagnostican un cáncer metástasico, lo que se te cae encima es el Sistema Solar entero, y también necesitamos de alguien que nos demuestre que, aun así, podemos seguir viviendo, quizá menos de lo que nos hubiera gustado, claro, pero con las mismas ganas y dignidad.
Así que este post quiero dedicarlo a Francis, Rosa, Carolina, Vero, Merche, Meri, Tatiana, Neus, Sandra, Anna Lisa...y como no, a ti Francisca.  
Porque con vuestras historias de años de lucha me habéis demostrado que se puede aprender a convivir con la enfermedad. Sí, vosotras, las que no podéis hablar del cáncer como un "paréntesis" en vuestra vida, sino más bien como un punto y a parte, que ha marcado el final de una etapa donde todo era más fácil, y el comienzo de otra en la cual, cada día, toca batallar contra el dolor físico y psicológico para hacer algo que se parezca lo más posible a una vida normal.
Vosotras, las que os conocéis cada rincón del hospital, el nombre de todos los enfermeros, los números de las consultas, los precios de la cafetería, las historias de los otros pacientes, los nombres de los tratamientos, las caras de los técnicos del TC y de la gamma.
Porque sois vosotras las que me habéis enseñado a no dejar que el temor nos quite más de lo que ya nos ha quitado el cáncer.
Sí, vosotras, las del otro 20%. Aquel 20% que lucha aunque los pronósticos digan que estamos en el porcentaje que va a perder la batalla. Pero es que los pronósticos no saben una cosa: que aun así, nuestra esperanza es más fuerte que nuestro miedo.