El de Chambord es el más representativo y simbólico de cuantos componen el conjunto de Castillos del Loira
Este icónico lugar sólo pretendía, a pesar de sus
440 habitaciones, 365 chimeneas y 84 escaleras, ser un humilde pabelloncito de caza para el Rey Francisco I.Es más que probable que Leonardo da Vinci, quien vivía en las inmediaciones, tuviese algo o mucho que ver
en su diseño, construcción y estilo, sobre todo cuando pensamos en las originales escaleras de doble hélice, por las que se puede subir sin toparse con quienes en ese mismo momento estuviesen bajando, o viceversa...Y como todo lo que tiene que ver con Chambord alcanza cifras macro, el edificio está rodeado de más de 50 kilómetros cuadrados de bosques, una extensión cercana a la de la ciudad de París.