El padre de la criatura

Por Lectoraprofeymama

Llevo ya varios días queriendo hablaros de probablemente la persona más importante para mí en todo este proceso: mi media naranja, mi compañero hace tres años y medio y mi marido desde hace unos meses, que de pronto acaba de adquirir un nuevo e inesperado (para él) rol: el del padre de la criatura.

Puede parecer una tontería, pero ya se lo he escuchado a varias parejas: vale que no ves tu futuro sin hijos, vale que por los motivos que sean decides que por fin es el momento, vale que te hartas de leer sobre maternidad mientras intentas concebir y muchas conversaciones giran en torno al «¿nosotros esto cómo lo haremos?»… pero cuando te quedas embarazada hay un momento de sorpresa en que casi no te lo crees. ¿En serio? ¿Vamos a ser padres? A las mujeres normalmente ese momento nos dura menos, unos días de no acabar de creérnoslo y ya. Algunos hombres, sin embargo, se pasan en ese estado de incredulidad bastante tiempo.

En nuestro caso, el futuro padre está mitad encantado, mitad en la inopia. Por un lado, le gusta hablar de los avances semanales de nuestro pequeño embrión, le cuenta la noticia a todo el que puede y está especialmente atento y cariñoso conmigo (y eso que ya era cariñosísimo antes). Por otro lado, admite que aún no se hace del todo a la idea y me dice que cuando me vea engordar tal vez lo empiece a ver como algo más real… A ratos alucina en colores cuando se da cuenta de que va a ser padre de verdad (bueno, yo también alucino, pero menos) e intenta hacerse a la idea de cambios de hábitos que tiene que empezar a hacer lo antes posible si no quiere que sean muy duros, pero le cuesta y lo va postergando (menos mal que nos quedan meses por delante). En fin, que de momento le gusta pero le cuesta asumir la nueva etiqueta de «papá». Normal, por otra parte.

Por eso llevo unos días dándole vueltas al coco y he tenido una idea, pero necesito vuestra ayuda. Me gustaría hacerle un regalito por el día del padre. Pero de ahí no paso, no se me ocurre qué regalarle. Lo primero: no quiero que sea un chupete, porque hemos decidido que en principio pasamos de chupetes porque el mejor chupete es la teta. Lo segundo: me gustaría que, evidentemente, fuese algo que le ayude a ubicarse en su nuevo rol de padre. Lo tercero: a ser posible (pero no imprescindible), que sea algo que vaya a disfrutar él o que lo comparta con el bebé, los bodies con mensaje de «mi papá mola» y similares son chulísimos, pero eso servirá para que lo mire y lo guardemos en un cajón. Hasta ahora esa es mi mejor opción, pero ya sería la repera dar con una idea de algo que él pueda mirar, requetemirar y disfrutar. ¡Al fin y al cabo es un regalo para él!

¿Me ayudáis? ¡Por favor, dadme ideas en los comentarios!


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