El Palacio de Mafra, una maravilla barroca

Por Viajeros

A escasa media hora de Lisboa se encuentra la ciudad de Mafra, que pese a ser pequeña alberga uno de los mayores palacios de Portugal: el Palacio Nacional de Mafra es una de las grandes maravillas del barroco portugués, y nunca mejor dicho lo de grande, ya que ocupa nada menos que 40.000 metros cuadrados.

El palacio fue construido a principios del siglo XVIII e inicialmente tenía una función muy distinta: estaba destinado a ser un convento más bien modesto, construido alrededor de la basílica central que aún hoy existe. Sin embargo, la afluencia de riquezas de las colonias hicieron que el rey Juan V cambiara de planes y decidiera construir en su lugar un gran palacio-convento con biblioteca incluida (la cual alberga actualmente unos 40.000 valiosos libros).

Fueron esas riquezas las que permitieron hacer de este palacio una de las grandes maravillas del barroco portugués. La fachada severa engaña, ya que el interior del edificio está ricamente adornado y posee elementos de mobiliario y decoración muy refinados. Se aprecia, no obstante, un claro contraste entre la parte dedicada a los monjes y la destinada a los aposentos reales. Esta mezcla de funcionalidades es una de las principales características distintivas del edificio.

Sin embargo, la parte más espectacular del palacio se encuentra justamente en las dependencias de los monjes: se trata, naturalmente, de la gran biblioteca rococó. Esta destaca no sólo por sus dimensiones (casi 100 metros de largo) y su rica ornamentación, sino también y sobre todo por el gran número de obras valiosas que alberga, algunas verdaderas piezas de museo.