El parasol francés de Jane Kelder

Publicado el 03 febrero 2017 por Marili @otroromancemass
Sinopsis:
 Cuando Martha Calloway, dama de compañía de Lady Kerrington, se ve abocada a regresar a Horston diez años después de su partida, su corazón se inquieta profundamente. Sabe que allí sigue Nicholas Wayne, a quien ella decepcionó al no cumplir una promesa. Además, también es consciente de que las vecinas del pueblo van a criticar su nueva condición, pues todas creían que se había casado con un barón. Para evitar sus miradas, acepta un parasol que le regala una compañera.
La vida de Nick ha cambiado mucho en este tiempo. Cuando descubre que Martha ha regresado, espera una explicación sobre lo sucedido en el pasado, pero ella evita afrontar ese momento. Es entonces cuando Nick decide demostrarle que ya no le importa. Sin embargo, tal vez se esté engañando a sí mismo.

Opinión personal:
No hace mucho ya dije que Jane Kelder se ha convertido en lectura obligada para mí y, como veis no he tardado mucho en leer su última publicación.Aunque sea parte de una serie y hay algunos personajes a los que ya conocemos, considero que se pueden leer de forma totalmente independiente. Ya sabéis que yo tengo muy mala memoria y cuando comencé no recordaba a los protagonistas. Después, a medida que se va dejando caer la información, se activaron mis recuerdos, pero los datos relevantes se dan. Os recomiendo que los leáis, porque es una autora que me gusta, pero no es necesario para situarse en esta novela. Además, esta no es muy extensa e ideal para hacerse a la idea de si gusta el estilo o no. Creo que todas sus publicaciones tienen un sello inconfundible ya que el retrato social y las circunstancias que rodean a los protagonistas, roban mucho protagonismo dejando el romance en un segundo plano. Por ello, avanzo que no estamos ante una novela en la que el peso de la historia recaiga en la parte romántica. Al menos, a mí no me lo ha parecido.
Lady Kerrington lleva la batuta en la trama y, tanto por posición y poder como por  ser la cabeza de familia, es la que marca la vida del resto de los personajes. Pese a que adelanto que no protagoniza ningún romance, es un personaje que me ha gustado mucho, refleja de forma bastante precisa la conducta y muchas ideas de la aristocracia de la época. Su  hipocresía, egoísmo y la connotación negativa hacia las condiciones sociales de menor categoría. Sus diálogos no tienen desperdicio y son como latigazos de realidad que rompen con la parte más edulcorada de las novelas románticas usuales. Como ya he dicho, no considero que las novelas de Jane Kelder se las pueda tildar de románticas, más bien creo que son pequeñas historias que reflejan un momento social muy concreto, criticando y retratando las pequeñas vivencias de una localidad y siempre acompañadas de una o más tramas paralelas. En este caso el romance, que no tiene mucho peso aunque siempre esté presente.No es una historia nueva dentro de la novela de la época y veremos reflejados grandes personajes tópicos, quizás por eso creo que se retrata de forma bastante plausible esa pequeña sociedad del siglo XIX
Martha es la hija de una familia de buena posición, tanto económica como social que una vez perdido su estatus, se ha visto obligada a trabajar. Y una de las pocas ocupaciones honorables para una mujer de su condición es convertirse en la dama de compañía de una noble. Ya de joven queda patente que carece totalmente de prejuicios sociales al enamorarse del hijo del herrero del pueblo. Pero, como una buena hija, siguió las instrucciones que le dictaron sus progenitores jugando con su buen corazón, sin percatarse de que eso rompería su sueño de juventud.
De carácter dulce y domable le ha sido fácil adaptarse a su nueva situación, pero un giro del destino hace que se tenga que enfrentar de nuevo a su pasado, a sus sueños perdidos. Creo que Jane Kelder ha construido un personaje de forma muy coherente, resulta tan fácil visualizar su timidez, su congoja, su impotencia ante una situación que no puede controlar, dominada por la culpa, en algunas ocasiones, por la vergüenza en otras, pero incapaz de poder tomar − ya que en la época sería lo usual  − las riendas de su vida y siempre a la merced de la voluntad de los que la rodean. Cómo me ha gustado la escena final!
Nick Gardner es un superviviente. No es un personaje al que conozcamos en exceso, algo que lamento, pero sí lo suficiente para saber de su lealtad. Criado en unas condiciones muy distintas a las que disfruta ahora, se mueve de forma cómoda tanto entre los seres de condición social baja como entre los clientes de su hotel. Queda muy reflejado que le resulta imposible controlar su rencor y, si bien al principio se muestra algo parco y distante, no tarda en demostrar que es una buena persona y que su corazón sigue anclado en el pasado.
En la novela vuelve a tomar importancia esa crítica social que es constante en las novelas de la autora, aunque esta vez toma relevancia la aristocracia que acaba de llegar en perjuicio de los habitantes de Horston. Veremos nobles venidos a menos que harán lo imposible, por poco honesto que resulte, para conseguir mantener su nivel económico. Esas alocadas jovencitas que por la diversión de ser rebeldes son capaces de jugarse su destino y el de sus allegados. El daño de los rumores y la crueldad de algunas personas.
El romance tiene lugar gracias a las segundas oportunidades. No soy muy dada a que me resulte creíble en un plazo tan largo de tiempo, pero entra dentro de la posibilidad dadas las circunstancias de ambos. Me gustaría destacar el reflejo del disimulo y la inteligencia de decir sin palabras, de convencer sin manipular, de la importancia de una mirada y un pequeño roce, de la maestría en el uso de los pocos recursos con los que contaba una mujer en su época. He disfrutado mucho de esos pequeños detalles.
«El parasol francés», − veréis la importancia de este objeto en el transcurso de la historia −  no es una novela que sorprenda pero sí que he disfrutado con su lectura. Como siempre, narrada con un estilo en el que la autora cuida con detalle el vocabulario, las costumbres y el comportamiento de los personajes. Quizás, siendo como soy lectora de novela romántica, he echado en falta un mayor protagonismo del romance que termina resolviéndose en la última parte de la novela de forma, algo precipitada o como consecuencia de la evolución del personaje de Martha. Soy consciente de que siempre mis quejas son las mismas, pero no lo puedo evitar! Unas cuántas páginas más con algunas escenas extra entre ellos hubieran redondeado su historia.
Comentar también que la propia autora nos da a conocer al final de la novela que deja momentáneamente la campiña inglesa para situarse en tierras españolas. Sabéis que me encantan las novelas ambientadas en la península, así que huelga decir que estoy deseando leerla. 
Datos de interés:Ficha del libro: Ficha de la autora: Web de la autora:

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