El Parlamento Europeo condena el alquiler de madres. La Cámara aprobó este jueves el informe anual
sobre Derechos Humanos y Democracia en el Mundo, en el que rechaza “la práctica de la subrogación, que mina la dignidad humana de la mujer, puesto que su cuerpo y sus funciones reproductivas
son usados como una materia prima”.
Obispos europeos de la Iglesia Católica han saludado la resolución.