el jueves, noviembre 21, 2013 En 1994, 21 naciones caribeñas se reunieron en el campo de fútbol para jugar por la Copa Caribeña. Trinidad y Tobago saldría victoriosa, venciendo, entre otros, a Barbados. Pero estos dos países no coincidirían en el que es, quizás, el partido más extraño jamás jugado.
Así que cuando Barbados vio que estaban ganando 2-1 y solo le quedaban 10 minutos, tenían dos opciones: intentar meter un tercer gol o meterlo en propia puerta para producir el empate y esperar tener suerte en la prorroga. Como se muestra en el vídeo, eligieron la segunda estrategia.
Lo extraño vino cuando con el empate, Granada podía pasar la ronda clasificatoria tanto ganando con un 3-2 como perdiendo el partido con un 2-3, por lo que intentaron marcar un gol en cualquiera de las porterías: en la suya o en la de Barbados. Durante 5 frenéticos minutos, Barbados defendió ambas porterías contra el asalto bilateral de Granada. Granada fracasó y Barbados ganó el partido en la prórroga con un 2-4, pasando la ronda clasificatoria. Fuente: Mental floss