El peor aterrizaje del mundo
Volar es más o menos seguro, pero hay veces en las que parece que hay que darle un poco de emoción al asunto de aterrizar y algún gracioso se le ocurre crear una pista de aterrizaje en el lugar menos insospechado para poner las cosas un poco más interesantes, tan a pilotos como pasajeros. Porque empezar un viaje con un aterrizaje tranquilo no es emocionante. Así que hoy os descubrimos un aeropuerto para generar tensión y adrenalina a raudales. No todo en esta vida es tranquilidad. ¿Y dónde se encuentra esta joya digna de cualquier parque temático? Pues está bien escondida entre el paisaje de Groenlandia.
Estamos hablando del aeropuerto de Narsarsaug, el único aeropuerto internacional de Groenlandia. Este aeropuerto, os puedo asegurar que no deja indiferente a nadie, y es que el aterrizaje impresiona pero su paisaje deja sin palabras, así que la belleza y el miedo se mezclan y nunca sabes quien gana hasta el momento en que bajas del avión de una pieza y puedes disfrutar del paisaje que rodea al aeropuerto más famoso de Groenlandia.
Aterrizar en Narsarsuaq es sinónimo de acercarse a un terreno inhóspito congelado, rodeado de un mar helado, lleno de icebergs, con fuertes vientos. Este aeropuerto esta justo al lado de un fiordo, por lo que antes de llegar a la pista el piloto debe dar un giro de 90º sino quiere acabar al fondo del fiordo de Groenlandia.
Para que nos hagamos una idea,
Así que, con aeropuertos como éste se puede decir que, una vacaciones no empiezan hasta que no se ha aterrizado en el destino. Eso si, os recomendamos que si podéis visitéis este aeropuerto porque os dejará sin palabras.