El perfil demográfico no es muy distinto al del emprendedor en el resto del mundo. El Global Entrepenurship Monitor, que analiza a 69 países, destaca que las personas con edades entre 25 y 34 años muestran las tasas más altas de actividad emprendedora, en todas las regiones.
Otras características, como la formación universitaria (el 53% la tenía) y la carencia de experiencia (para 7 de cada 10 era su primer aventura empresarial), son también comunes en el ecosistema emprenderdor, dijo Juan Carlos Leiva, coordinador del Programa de Emprendedores del Instituto Tecnológico de Costa Rica.
Leiva, quien participó en el análisis de los resultados del estudio del Observatorio como autor del capítulo sobre el fenómeno emprendedor o proceso de creación de empresas en Costa Rica, señala que de las estadísticas se derivan recomendaciones para quien quiera iniciar un negocio en el país.
1) Tener clara la motivación. La mayoría de empresarios ticos emprenden porque quieren alcanzar la independencia financiera (68%, de acuerdo al estudio del Observatorio). ”Si su motivación es necesidad, no significa que le va a ir mal, pero es importante que lo que impulse al emprendedor sea sometido a un buen análisis”, dijo Leiva.
Asimismo, es importante que conozca su contexto: Cuál es su red de contactos, cuánta gente conoce, qué experiencia tiene en el sector, etc.
Adicionalmente, la mentalidad de “Alertiveness”, o estar en alerta permanentemente, para detectar esas oportunidades en su contexto es muy importante si se observa la experiencia de los emprendedores.
2) Asociarse. En la unión está la fuerza y por eso el experto aconseja que busque socios activamente. De acuerdo a la segunda ecnuesta nacional, en el país el 55% de los emprendimeintos son individuales, aunque el dato es menor cuando se trata de mujeres, quienes son más asociativas, en especial con el esposo o miembros de la familia.
“Los socios que se complementen con habilidades y competencias son una mejor garantía, entonces el tema de las sociedades no hay que cerrarlo del todo. Las sociedades pueden ser un buen primer paso para un emprendimiento con probabilidades de éxito”, señaló Leiva.
3) Definir los recursos con los que puede contar. Desde algo tan sencillo como si su pareja o familia van a poder apoyarlo o no en esa aventura.
Por la parte financiera, la mayoría inicia con sus fondos propios (el 75%), algo que es también común en todo el mundo. En ese sentido, las sociedades también pueden jugar un papel muy importante. Sin embargo, la necesidad de financiamiento será determinada por el emprendimiento y el crédito puede ser clave para un negocio que busca crecimiento.
Fuente http://pymes.elfinancierocr.com/node/1599
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