Cuando el periodista es la noticia y no lo que dicen sus entrevistado, algo anda mal. El pasado viernes 23 de mayo, los colombianos acudimos con ansiedad a ver el ‘Gran Debate’ de Noticias Caracol con los 5 candidatos a la Presidencia. Pero en lugar de ver las ideas, la atención quedó atrapada en las intervenciones del moderador, el periodista Luis Carlos Vélez, director de Noticias Caracol.
Las complejas reglas del Debate ideado por Vélez y parte de su equipo pretendían una asepsia que, a mi modo de ver, contradicen la esencia del debate porque quería evitar a toda costa la confrontación entre los candidatos. Las reglas, creo que propuestas de buena fe, buscaban que no tuviésemos un escenario para la guerra sucia que rodeó a las campañas en este año, pero llegó a tal extremo ese objetivo que cayó en el riesgo que se podría presentar: Que el moderador interpretara las referencias al presente y le pasado como ataques a otros candidatos.
Cuando Martha Lucía Ramírez, Enrique Peñalosa y Óscar Iván Zuluaga criticaron aspectos de la actual administración fueron interrumpidos por Vélez quien consideró que eran “ataques” al candidato-presidente Juan Manuel Santos.
En redes sociales no se hicieron esperar las críticas contra el moderador quien durante los comerciales tenía que sufrir los embates de los candidatos y sus asesores quienes consideraron que no había garantías y que todo apuntaba a que no se podía criticar al candidato-presidente.
Vélez olvidó el principio fundamental de que el periodista es un simple facilitador en el flujo de la información y que en un rol de moderador se debe moderar mas que provocar a los participantes.
Me temo que éste podría pasar fácilmente a la historia como el peor debate político transmitido por la televisión colombiana. Sé que esto dejó grandes aprendizajes al Canal Caracol, un medio que suele llevar la delantera a su rival RCN en este tipo de espacios.