En Reino Unido durante la Edad Media se llegaron a usar perros para hacer girar los asadores. Para hacerlo se colocaban en una rueda parecida a la de un hámster y se turnaba con otro perro para evitar una fatiga excesiva. Con el fin de evitar que fueran demasiado lento, se les entrenaba tirándole carbón caliente.
Estos perros sustituían a los niños, en el caso de asadores más modestos, y adultos, que hasta entonces eran víctimas de quemaduras, ampollas y cansancio. Además, los operarios debían trabajar en uniforme o, en la época tudor, desnudos y evitando orinar en el fuego. Sin embargo, los perros podían trabajar más horas seguidas y trabajaban solo por comida.
Se cuenta además que este perro, que ha sido referido como una variedad de spaniel, Glen of Imaal Terrier o corgi galés, era llevado a la iglesia, donde eran usados de calientapiés. Fueron tan populares que hasta la reina Victoria los mantenía como mascota. Sin embargo, fueron sustituidos por máquinas de vapor y se extinguieron a finales del siglo XIX, algo que ya auguraba un siglo antes Memoirs of British Quadrupeds, publicado en 1809.
Fuente:Todayifoundout, Education.gtj.org.uk, Wikipedia.org