Revelan por primera vez que el plesiosaurio, un reptil marino prehistórico, no se reproducía por huevos sino que daba a luz a sus crías vivas. El estudio, que publica la revista Science, lo ha realizado la Universidad Marshal en Huntington (EEUU) y el Instituto de Dinosaurios del Museo de Historia Natural de los Ángeles (NHM, por sus siglas en inglés) a partir de un fósil de 78 millones de años que alberga un embrión en su interior.
Recreación del nacimiento de una cría de plesiosaurio. Imagen: S. Abramovicz
La nueva sala de dinosaurios del Museo de Historia Natural de los Ángeles cuenta con un ejemplar único de fósil de plesiosaurio adulto. Según publica la última edición de la revista Science, un grupo de investigadores del museo y de la Universidad Marshal en Huntington ha constatado que es el fósil de un embrión de reptil marino situado en el interior del fósil de su madre.
La investigación, liderada por Robin O’Keefe, de la Universidad Marshal en Huntington, y Luis Chiappe, director del Instituto de Dinosaurios del Museo de Historia Natural, demuestra que este fósil doble constituye la primera prueba de que los plesiosaurios daban a luz a crías vivas, y que no incubaban huevos en la tierra.
Se trata de un Polycotylus latippinus de 15,4 pies de longitud. Un reptil gigante, carnívoro y con cuatro aletas conocido como plesiosaurio, que vivió durante la era Mesozoica. “El esqueleto del embrión que contiene este ejemplar en su interior nos proporciona además información sobre el desarrollo del cuerpo: costillas, 20 vértebras, hombros, caderas y los huesos de las aletas”, explican los expertos.
“Aunque existen pruebas de que otros grupos de reptiles acuáticos del Mesozoico también daban a luz a crías (y por lo tanto, eran vivíparos), hasta ahora no se habían encontrado evidencias previas en un orden tan importante como es el de los plesiosaurios”, apunta la investigación.
Al cuidado de sus crías
Asimismo, O’Keefe y Chiappe han concluido que los plesiosaurios eran los únicos reptiles acuáticos que daban a luz a una sola cría de gran tamaño y que posiblemente habrían vivido en grupos sociales al cuidado de sus crías.
“Los científicos descubrieron hace mucho tiempo que el cuerpo del plesiosaurio no era apto para salir del agua y poner huevos en un nido”, declara O’Keefe. Por esta razón, la falta de pruebas sobre el nacimiento de los plesiosaurios resultaba desconcertante. Este fósil ejemplifica por primera vez la manera en que nacían los plesiosaurios y de esta forma se resuelve por fin la incógnita.
Además, el embrión presenta un gran tamaño en comparación con su madre y es mucho mayor de lo que podría esperarse si se compara con otros reptiles.“Muchos de los animales que existen hoy en día, y que dan a luz a una única cría de gran tamaño, son sociales y cuidan de sus crías. Nos preguntamos si los plesiosaurios se comportarían del mismo modo, y si su conducta social habrá sido más similar al de los delfines que al de otros reptiles”, señalan.
En la actualidad se desconoce la existencia de parientes cercanos vivos de los plesiosaurios. Sin embargo, este animal estaba muy presente en las aguas de los océanos durante la Era de los Dinosaurios. Se encontraba entre los depredadores más importantes del mar interior occidental, gran masa tropical de agua que dividía Norteamérica durante el Cretácico, cuando las aguas del Océano Ártico y el Golfo de México penetraron en el continente y se unieron.
“En el NHM nos sentimos muy orgullosos de que estos materiales irremplazables estén al alcance, no sólo de los científicos dedicados a la investigación, sino también del público”, concluyen los expertos.
Referencia bibliográfica:
F. R. O’Keefe y L. M. Chiappe. “Viviparity and K-Selected Life History in a Mesozoic Marine Plesiosaur (Reptilia, Sauropterygia)”. Science 333 (32–34): 870 – 873. Agosto de 2011. 10.1126/science.1205689
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EXPOSICIÓN DE MÁS DE 300 FÓSILES
Este excepcional ejemplar del NHM fue descubierto en 1987 por Charles Bonner en el Rancho Bonner, situado en el Condado de Logan, Kansas. Prácticamente completo, a excepción de algunas partes del cuello y la cabeza del adulto, el ejemplar de la “madre” y su cría ha sido conservado por el NHM.
Phil Fraley Productions se ha encargado de montarlo, bajo la supervisión de los doctores O’Keefe y Chiappe. En la actualidad, este plesiosaurio puede verse en la sala de los dinosaurios.
Esta nueva exposición del NHM, de 14.000 metros cuadrados, alberga más de 300 fósiles y 20 montajes completos de dinosaurios y criaturas marinas.
Artículo publicado en Servicio de Información y Noticias Científicas (SINC).