A diferencia de los demás superhéroes de la Liga de la Justicia, Batman es un ser humano común. Sin embargo, él también posee un poder. Y gracias a ese poder, es superior a todos los demás.
Quien haya visto aunque sea la película de la Liga de la Justicia, puede identificar a los principales miembros de la misma, como Superman, Batman, La mujer maravilla, Flash, entre otros. Todos ellos son como dioses, debido a que poseen superpoderes capaces de destruir planetas enteros y viajar por el tiempo. Gracias a Dios, estos superhéroes utilizan sus poderes para hacer el bien, por lo que los hacen los perfectos protectores de la humanidad.
Pero en la Liga hay un miembro que solo es un humano normal: Batman. No es fuerte como Superman, ágil como La Mujer Maravilla o Veloz como Flash. Prácticamente se ve en desventaja a la hora de enfrentarse a villanos muy poderosos. Aun así, toda la Liga lo respeta y lo tienen en cuenta para formar parte de los defensores de la Tierra. Y eso es porque Batman posee un poder valioso, que lo hace superior a todos los demás superhéroes: La perseverancia.
Batman ha tenido una vida difícil, desde el asesinato de sus padres cuando era solo un niño. Y también sufrió otro trauma durante la niñez, cuando cayó a una cueva llena de murciélagos. Todo eso lo marcó de por vida. Pero el joven Bruce Wayne logró enfrentar sus miedos y se transformó en un superhéroe. Pudiendo ser solo un playboy, cuya vida rondara en fiestas y viajes por el mundo, él decidió invertir su fortuna en crear artefactos que lo ayudaran a enfrentarse a las personas malvadas y proteger a los débiles. Y no solo eso, también desarrolló la capacidad de ser el mejor detective de ciudad Gótica para descifrar los crímenes y enviar a prisión a los malvados.
Cuando conoció a Superman, Batman se percató de lo poderoso que era. Sin embargo, eso no lo intimidó. Averiguó sus debilidades y lo enfrentó, sabiendo que era un simple humano contra un “Dios”. Tiempo después, y ante la ausencia de Superman, Batman reclutó a varios superhéroes, conformando así La Liga de la Justicia. Aunque al inicio algunos rechazaron el proyecto, Batman no se dio por vencido y siguió con su plan de proteger a la humanidad. Poco a poco lo consiguió y, juntos, pudieron salvar al mundo.
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