La creatividad no se trata solo de volverse elocuente sobre la belleza de una corriente de bosque o una costa escarpada. De hecho, la
creatividad más difícil es a menudo la más gratificante: ser creativo con los aspectos cotidianos de la vida. Eso significa estar atento a todo, y me
refiero a todo , a tu alrededor.
Comience con este ejercicio:
Siéntese en un parque, el centro comercial, Starbucks, donde haya muchas vistas, olores y sonidos. Usa los cinco sentidos para disfrutar de tu entorno.
¿Escuchas el roce de las hojas secas o el silbido de la máquina de café espresso ? ¿Hueles la riqueza de la tierra húmeda o el aroma del
café, o estás abrumado por la colonia del hombre sentado a tu lado? ¿Cómo se siente el banco, la silla o el suelo debajo de ti?
Tómelo todo. ¡Luego escriba!
Busque la mejor palabra para describir cada vista, olor, gesto, sentimiento, sonido y cualquier otra cosa que se le ocurra. Si a su escritura le
falta alguno de los cinco sentidos: vista, olfato, sonido, tacto e incluso sabor, regrese y modifíquelo.
La creatividad a través de la observación es mucho trabajo, pero una vez que la hayas dominado , tu escritura será más rica y más gratificante por la adición.