Más de 7.000 millones de teléfonos móviles en el mundo, siempre encendidos y a mano, convierten la pantalla de estos dispositivos en eje estratégico de contacto con los consumidores. ¿Pero cómo hacer efectiva esa relación?
A diferencia de la televisión y la radio, los teléfonos móviles son personales y nos acompañan a donde quiera que vayamos. Se han convertido en el canal ideal para llegar con cualquier marca a un público objetivo, entregar mensajes específicos o mejorar el servicio al cliente. Pero ¿son las empresas plenamente conscientes de cómo utilizarlos para perfeccionar sus servicios y –lo más importante– garantizar una lealtad del cliente profunda y duradera? La tarea es más sencilla de lo que parece.
Gracias a las características del teléfono móvil como medio de comunicación personal, este ha sido catalogado por los expertos como el mejor dispositivo de tecnología persuasiva jamás inventado, y se convierte en una herramienta clave para el desarrollo de estrategias de mercadeo exitosas, pues debido al nivel de cercanía con los usuarios, clientes y consumidores, los mensajes pueden ser personalizados y selectivos.
De la mano de la tecnología el proceso se hace mucho más simple. Tal es el caso de la herramienta ‘Mensaje Inteligente’ de la compañía Gemalto, líder en seguridad digital, que permite a las marcas interactuar con los consumidores a través de los móviles, compartir comentarios e incluso hacer ‘correr la voz’ entre amigos y familiares en formato de comunidades, a través de las redes sociales. “Este servicio es conducido por una aplicación SIM y/o un app en smartphones y las marcas pueden personalizar los mensajes por completo para que coincidan con el perfil y el comportamiento de cada usuario final, y pueden enviarse en el momento preciso en que ofrezcan el máximo valor para el consumidor”, explica Daniel Cuéllar, vicepresidente de Gemalto para el Pacto Andino y el Caribe.
Con este tipo de herramientas se logra optimizar el rol de la telefonía móvil en las estrategias de mercadeo, generando mejores resultados con exactamente el mismo presupuesto. El canal móvil está siempre encendido y es interactivo; por eso es el medio ideal para ejecutar campañas de marketing. Pero se debe tener cuidado ya que es un dispositivo personal, por el que las personas sienten apego. El usuario final fácilmente podría percibir las campañas de marketing masivas, no enfocadas, a través del celular, como demasiado intrusivas. Y eso podría estropear el canal. Sin embargo, ejecutadas correctamente, no solo sientan las bases para un marketing eficaz, sino que también aumentan la lealtad y brindan a los usuarios finales promociones e información relevantes e interesantes para ellos.
Para maximizar el efecto, las empresas pueden tener en cuenta las siguientes pautas:
- Los consumidores deben ser quienes decidan si recibir o no los mensajes, para así construir una relación comercial basada en la confianza.
- Los mensajes deben ser enviados a quienes estén interesados en recibirlos para garantizar el alcance, interactividad y altas tasas de respuesta.
- Los mensajes que se comparten, además de ser relevantes, deben complementarse con recompensas tangibles.
- Las empresas deben identificarse desde el primer contacto, y ser transparentes acerca de quiénes son y qué quieren con esa relación que están construyendo a través de sus teléfonos móviles.
- Satisfacer las necesidades de los clientes, en cuanto a mensajes relevantes y en aplicar las estrategias que den al usuario final el control de la conversación.
Con la ayuda de la tecnología y aplicaciones de este tipo, el marketing móvil logra individualizar los mensajes como nunca antes lo ha conseguido otro medio de comunicación. Una oportunidad inmejorable para operadores celulares y marcas de establecer vínculos más estrechos con sus consumidores. Pero implementar estas soluciones no da espera, y quien lo haga primero marcará diferencias para siempre en la mente de los consumidores.