El poder los colores en los medicamentos

Publicado el 06 julio 2017 por Cristianmonroy

La elección de porqué una pastilla debería ser azul, rosa, roja, verde, amarilla o de cualquier otro color no está tomada al azar, de hecho importa, y mucho.

La correcta elección y uso de los colores en diversas industrias ha resultado ser un factor determinante, la farmacéutica no es la excepción.

Diversos estudios han demostrado que las personas suelen asociar los colores de los medicamentos con efectos específicos que van más allá del simple reconocimiento de la marca.

Una vez que nuestros cerebros han logrado encontrar una asociación, esta se vuelve real.

Se trata del efecto placebo que puede lograr que un medicamento sea más efectivo.

Imagina por ejemplo que estás tratando quemaduras de sol en tu cuerpo. La crema de este tipo suele ser blanca pero… imagina por un momento que la crema es de color rojo.

¿Cómo te hace sentir esa asociación?

Existen colores, como el rojo, que tienen un efecto en la presión y el ritmo cardíaco de las personas.

Las empresas farmacéuticas lo saben, y lo aprovechan a la hora de desarrollar nuevos productos o hacer rebranding de los ya existentes.

Según un artículo de The Atlantic las pastillas azules actúan mejor como sedantes. Las rojas y las naranjas como estimulantes. Las amarillas como antidepresivos. Las verdes reducen la ansiedad y las blancas alivian el dolor.

Los colores brillantes y el nombre de la marca grabado en la pastilla también resultan ser factores determinantes.

Una pastilla de color amarillo con el nombre de la marca grabado puede resultar más efectiva para el paciente que una pastilla del mismo color pero sin el nombre incluido.

En complemento, la asignación de colores resulta ser útil también en el proceso de manufactura.

En aquellos medicamentos sensibles a la luz, hay tonos que pueden proporcionar cierta opacidad, manteniendo estables las sustancias activas. Además de esto, los colores ayudan al reconocimiento de los fármacos.

Esto asegura que los medicamentos no se mezclen durante el proceso de producción o empaque. Lo cual de suceder podría tener repercusiones directas sobre la vida del paciente sin contar con el daño hacia la misma marca.

Ya del lado de los pacientes es fácil observar como los colores les ayudan a identificar los medicamentos que deben tomar.