Puede que alguno os preguntéis la razón por la que he desaparecido durante algunos días. A lo largo de todos los años que llevo en la blogosfera he visto numerosos casos de gente que afirmaba encontrarse apática y sin ganas de escribir. En mi caso nunca había sido así… hasta ahora.
En ocasiones, por mucho que queramos separar nuestra vida personal de nuestra vida cibernética es complicado. Las últimas semanas han sido un torbellino, una montaña rusa de la cual no me he podido bajar. ¿El resultado? Al llegar a casa a las mil lo último que me apetecía era entrar en el blog.
Este pequeño espacio es para mí un rincón, una pequeña bitácora donde ser yo misma, hablar de lo que me apasiona y disfrutar. Al principio me intenté obligar a escribir pero ¿Qué gracia tiene eso? Hoy, al fin, me han entrado ganas de escribir. No sabía muy bien que quería expresar pero nació en mí esa sensación de querer plasmar algo.
Estoy de vuelta…:)