El brindis de Serafín Marín a Alicia Sánchez Camacho en la Monumental
El PP y los toros
Artículo de Angel Abad en ABC
“En esta sinrazón de la prohibición de las corridas de toros en Cataluña, en este atentado a la libertad individual amparado por la legitimidad del Parlament, queda todavía tela que cortar. Finalmente el Partido Popular ha llegado a un acuerdo para permitir que el nacionalista Xavier Trias sea el nuevo alcalde de Barcelona. A cambio, la alcaldía de Badalona para los populares, que también tendrán acción ejecutiva en la Diputación de Barcelona. Acuerdo, pacto, compromiso..., de cualquier forma el PP es decisivo en el gobierno de la Ciudad Condal y en el de la provincia barcelonesa.
Decisivo, ¿les suena la palabra? El 26 de septiembre del pasado año, la presidenta del Partido Popular en Cataluña, Alicia Sánchez Camacho, acudió a la Monumental a respaldar la Fiesta, a defender la libertad de ir a los toros. Allí recibió el brindis del torero catalán Serafín Marín y allí lanzó un compromiso. Se acercaban las elecciones autonómicas y la máxima responsable de los populares catalanes aseguró que condicionaría cualquier pacto postelectoral a recuperar las corridas de toros en Cataluña.
En los comicios del 28-M el PP no consiguió ser decisivo en el Parlament, pero han llegado las municipales y la cosa ha cambiado radicalmente. ¿Servirán aquellas palabras de Sánchez Camacho para la realidad actual, con el PP decisivo en Barcelona y provincia? Al PP nadie le puede negar su compromiso con la Fiesta. Ahí esta el recurso de inconstitucionalidad presentado contra la resolución de la Cámara catalana. El PP ha abanderado, junto a Ciutadans, la resistencia contra una prohibición basada en razones puramente políticas.
Dejemos el recurso ante el Constitucional que siga su curso, apoyemos la recogida de firmas para presentar una Iniciativa Legislativa Popular en el Congreso que blinde la Fiesta en todo el territorio nacional, pero recordemos ahora aquellas palabras de Alicia Sánchez Camacho cuando recibió el máximo honor que un matador de toros puede hacer en un plaza, brindar su faena. El PP ahora es decisivo precisamente en la institución que en abril de 2004 declaró a la capital catalana como ciudad antitaurina.”